“Dios quiso” sanar a El Salvador y los ciudadanos decidieron “continuar el camino que llevamos en plena libertad y en plena democracia”. Así ha interpretado el presidente salvadoreño Nayib Bukele los resultados – aun provisionales- de las elecciones celebradas este domingo en el país.
Según informó la agencia Efe, en un discurso de casi 29 minutos y ante miles de sus seguidores, Bukele realizó fuertes reproches a los enviados especiales de los medios extranjeros, especialmente de España, y también aseguro, en referencia a organismos internacionales y a gobiernos de otros países, que “también quieren que se impongan que sean ateos”.
“Dios quiso sanar nuestro país y lo sanó”, dijo y siguió: “Déjennos dar la gloria (a Dios) si así lo queremos. ¿En qué les afecta, en qué les molesta?
Bukele aseguró que “gracias a Dios y gracias a este pueblo noble y unido, ustedes han visto como El Salvador pasó de ser el más inseguro” y “ahora, en estos próximos cinco años, esperan a ver lo que vamos hacer, porque seguiremos haciendo lo imposible y seguiremos demostrando al mundo el ejemplo de El Salvador”, concluyó.
Antes de que se conocieran los primeros datos del escrutinio oficial, que tardaron en llegar cuatro horas y media, Bukele, celebró su victoria y empezó a recibir felicitaciones de las cancillerías de países vecinos.
“De acuerdo a nuestros números, hemos ganado la elección presidencial con más del 85 % de los votos y un mínimo de 58 de 60 diputados de la Asamblea”, publicó en la red social X el gobernante cerca de dos horas después de que cerraran sus puertas los centros de votación.