Hoy se conmemora el Día del Brigadista, fecha creada en recuerdo a 12 brigadistas fallecidos en un accidente aéreo en 2009, y que cobra especial relevancia tras la intensa labor que despliegan los expertos en el combate al fuego en la Región de Ñuble y otras del país, mitigando y controlando los efectos de los incendios forestales.
Internarse dentro del fuego pareciera una locura, pero es la labor que día a día realizan los brigadistas forestales. Líneas de contención, cortafuegos, faena de control y liquidación de incendios, son parte de la rutina y por ende la coordinación y el trabajo en equipo son fundamentales.
En la Región de Ñuble 140 Brigadistas combaten los incendios. Su preparación teórica consta de seis días, reforzada con la práctica en base que se realiza durante toda la temporada. Estos brigadistas están divididos en unidades llamadas “Lleuque”, en honor al árbol endémico del país y de la zona precordillerana de la región. Forman 15 unidades más una que llegó a reforzar la región por la contingencia, repartidas en seis bases; El Ajial, Pemuco, Tres Esquinas, Bulnes, Base Quirihue, Base Quillón y Base Vivero de Álamos, Chillán.
Relatos en primera persona
Nicolás Pérez, de 32 años, es jefe de Brigada, y relata los tensos momentos que han vivido en febrero combatiendo el fuego. “En (el incendio) Santa Gertrudis Ibamos haciendo ensanche de línea para protección de casas y en el momento que nos cambia el viento nos tapó en humo y nos dejó sin visión. El skider (maquinaria pesada que realiza cortafuegos) se fue hacia una pendiente provocando que cayera en una quebrada, le grité al caballero si estaba bien y me tiré abajo, abrí la puerta y lo saqué, en menos de cinco minutos la máquina se estaba quemando”, revela..
Marcelo Fernández, de 24 años e integrante de la Brigada Lleuque 7, agrega que es su primera temporada “y nunca pensé que sería así, tenía experiencia como bombero pero esto es completamente distinto. En Quillón camino a Florida vimos una casa que estaba sola, ya la gente la había evacuado y nosotros nos bajamos y empezamos a desenrollar manguera, mojamos la casa, hicimos cortafuego luego nos tuvimos que retirar por el humo. Hace cuatro días pasamos por ahí mismo y estaba la casa, la habíamos salvado y fue súper gratificante”.
Daniel López, de 32 años, forma parte de la Brigada Lleuque 7. Explica que “ si uno decide trabajar en esto sabes que pones en riesgo tu vida, para los mega incendios del 2017 yo trabaja como brigadista de Arauco y me vi envuelto en llamas y solo porque el de arriba es grande se me abrió una ventana y pude salir del fuego. Lo que más uno piensa es en la familia y lamentablemente este trabajo te va alejando de ellos. Pero tengo un compromiso de ayudar a combatir los incendios y proteger las cosas que tanto le han costado a la gente”.
Para el director regional de Conaf, Juan Salvador Ramírez, este día toma un cariz distinto debido a las emergencias que estamos viviendo, “Lo que han hecho los brigadistas junto a las unidades de emergencia es de un valor gigante. Han trabajado palmo a palmo para contener incendios que no habíamos visto antes en nuestra región y que pusieron en peligro a nuestros vecinos y comunidades enteras”.