El caso Led, que investiga la fiscalía y que ha puesto la mirada en el municipio de Chillán, sigue trayendo coletazos entre los ediles locales.
Luego que la concejala de Chillán, Nadia Kaik, sostuviera en un programa de radio “Macarena” que el concejal del PPD, Camilo Benavente, “habría tenido un acuerdo” con la empresa CAM, la cual obtuvo el segundo lugar de la pauta de evaluación entre todas las propuestas de la licitación de luminarias; el concejal Benavente reafirmó que “postulé desde un principio que el proceso estaba viciado, por lo que la Municipalidad debía revocar la licitación, hacer un nuevo llamado y generar la menor deuda posible para las futuras administraciones municipales”.
Lo anteriormente señalado, dijo, consta en el acta del Concejo Municipal del día 13 de abril del año 2020, además de una presentación a Contraloría que realizó el concejal PPD, la cual señala la posibilidad de realizar un nuevo proceso de licitación, libre de vicios, donde se resguarde la legalidad y la fe pública de los procesos de licitación y adjudicación realizados por la municipalidad de Chillán.
Los cuestionamientos surgieron en las bases de licitación que ponderaban con mayor puntaje la ejecución del proyecto por sobre el monto final del mismo, además de multas muy bajas y simbólicas al oferente que no cumpliera con el plazo estipulado en su propuesta, lo que llamó poderosamente la atención del cuerpo de concejales, quienes solicitaron un informe a la Dirección de Control Interno, que avaló la propuesta de la comisión técnica, que era adjudicar a la empresa Itelecom.
“Los colegas concejales votaron a favor de la propuesta de Itelecom, pues después de muchas dudas fue el control interno quien en un informe solicitado, planteó que la adjudicación se encontraba en adecuada forma y fondo, por lo tanto, la responsabilidad de este acuerdo no fue de mis colegas”, señaló Camilo Benavente.
