A toda marcha continúa en la región de Ñuble el proceso de recuperación dirigido a las familias que perdieron todo tras la catástrofe de los incendios forestales que se han registrado desde el 1 de febrero del presente año.
A nivel regional, existe un catastro de 441 requerimientos de vivienda de emergencia u otra solución habitacional, de ellos, 189 se encuentran procesados. De estos últimos, un 35% está en proceso de construcción, mientras que el 18% ya está terminado. Respecto a la diferencia que se genera, hay cerca de 80 viviendas que están en proceso de asignación con proveedores para que las construyan.
La información fue entregada el jueves por el delegado presidencial de Ñuble, Gabriel Pradenas, al ser consultado por los avances del proceso en el marco de la visita de la delegada por la reconstrucción, Paulina Saball, quien llegó para articular la fase de soluciones a largo plazo y escuchar propuestas de los distintos actores.
“Si bien tenemos un número mayor de fichas Fibe que están procesadas, no todas las personas van a aceptar la vivienda, sino que van a optar a herramientas y opciones paralelas que tienen que ver con subsidios de arriendo o con bonos de acogida. El número total de las fichas no necesariamente se correlaciona con el número de viviendas de emergencia que van a ser asignadas”, dijo Pradenas.
En esta primera fase de respuestas tempranas, el gobierno reconoció los avances y también las dificultades que se han enfrentado en materia de la habilitación de servicios sanitarios y eléctricos, los que se esperan subsanar próximamente.
“Tenemos brechas en materia de proveedores para material de pozo séptico y también estamos corrigiendo algunos temas sobre las distancias de los empalmes, porque en los sectores rurales a veces la distancia del empalme a la vivienda tiene metraje totalmente distinto de lo que pueden ser en la zona urbana, donde hay una dimensión de 5 metros y en el sector rural pueden ser varias cuadras de distancia. Entonces, afinando temas con las concesionarias”, explicó.
“Esperamos que esta semana llegue la primera tanda de las fosas sépticas para que el gobierno regional instale. Los proveedores deberían hacer llegar directamente a las comunas las fosas y en algunos casos van a llegar directamente al regimiento de Chillán”, agregó el delegado.
En la región de Ñuble, 11 comunas registraron viviendas con daños de distinta magnitud producto de los incendios forestales, siendo Quillón, Coelemu, Ránquil y Quirihue aquellas con mayor afectación en ese sentido.
Recuperación por comuna
Chillán fue una de las primeras comunas en sufrir los siniestros. De las 30 familias afectadas, a las cuales se les aplicó la Ficha Básica de Emergencia, Fibe, 14 optaron por la vivienda de emergencia, 14 por el subsidio de arriendo, una decidió reconstruir por cuenta propia, y la última tuvo pérdidas relacionadas con maquinaria y herramientas de emprendimiento.
Las 14 viviendas de emergencia están siendo instaladas en los sectores de Boyen (9), Quilmo (3), Verde Esperanza (1) y Doña Francisca (1).
El alcalde, Camilo Benavente, evaluó positivamente el proceso de reconstrucción y de reposición de las pérdidas que sufrieron las familias.
“En menos de 15 días ya hemos recibido las primeras viviendas de emergencia, lo cual es una señal de eficiencia respecto de estas compras que significa trabajar sobre la marcha, un proceso que también incluyó el retiro de escombros, reinstalación de las familias. En medio de esta catástrofe, Chillán fue una de las primeras comunas en ingresar al Sistema Nacional de Registro de Información, la ficha FIBE, que nos permitió entregar información respecto del número de damnificados, personas involucradas y familias diferenciadas por género”, sostuvo.
Respecto a los servicios básicos, la directora de Dideco, Zoraya Martínez, precisó que “las viviendas de Boyén, Quilmo y San Ramón obtenían agua a través de camiones aljibe, pero el fuego quemó todo, incluidos los estanques. Este proceso de reposición ha sido paulatino, ya que las viviendas ni los estanques se han podido instalar en el mismo lugar, ha existido un trabajo meticuloso que ha hecho el equipo de emergencia y que ha reforzado a través de una reunión con el GORE y que significa evaluar las fosas que están dañadas, considerando un estudio del subsuelo. Esto significa esperar el análisis de un estudio que comenzó este jueves, para determinar si las fosas se pueden ocupar o se deben cambiar de lugar”.
Las viviendas que se utilizan para las familias afectadas no consideran instalación de fosas, proceso que se subsidiará a través de recursos del GORE.
Con respecto a la energía eléctrica, la cual corresponde a Copelec, se está gestionando la conexión a los empalmes.
Se espera en el corto plazo que las familias tengan sus casas instaladas, incluyendo sala de baño, instalación eléctrica domiciliaria, con fosa y estanque de agua.
En Ránquil, cuatro viviendas de emergencia, de un total de 25 asignadas, están instaladas. Sin embargo, aún están incompletas porque requieren la instalación eléctrica y una fosa séptica, ambos servicios en gestión.
“Nosotros informamos 41 fichas Fibe, de las cuales, según el filtro del gobierno, 25 proceden a la vivienda de emergencia. Sin embargo, tenemos otro criterio donde estamos en conversaciones. Creemos que es bueno analizar caso a caso una vez que ya estamos entregando las demás”, explicó el alcalde Nicolás Torres.
Entre las preocupaciones que han sido planteadas por el jefe comunal se encuentran las necesidades de las familias en lo productivo y habilitación de cierres perimetrales.
“Estamos a la espera de las noticias desde el nivel central para el tema agrícola. Si bien se han recibido aportes a las familias afectadas en el ámbito productivo, no tenemos información respecto a la universalidad, solo de los beneficiados de Indap –Prodesal, pero también necesitamos apoyos para la universalidad. (…) En lo que es relativo a cercos, materiales de construcción, estamos bajo, porque los municipios chicos no tienen muchos recursos para gestionar emergencias”, recalcó.
Un total de 26 inmuebles fueron consumidos en su totalidad por el fuego en Ninhue. Nueve ya han sido reinstalados con la ayuda del gobierno, aunque aún no están terminados por la falta de los servicios básicos para su habitabilidad. De acuerdo al alcalde, Luis Molina, falta por levantar otras 15.
“Lo que falta son los estanques de la parte sanitaria, pero eso es porque los proveedores no tienen. Ellos van a resolver a ver si se puede hacer una compra en el mercado de la región (…) El otro tema es la instalación de la luz. Se quemaron los cables, los postes. Está con una muy buena disposición la Cooperativa Copelec, que tiene toda la parte norte de Ninhue. Desde el primer día ya estaban en terreno cambiando los postes, colocando las líneas y regularizando todo lo que el fuego nos dejó botado. Ellos han tenido muy buena disposición para ir en ayuda de las familias donde están estas viviendas y poder hacer las instalaciones”, señaló.
Agregó que los incendios arrasaron con los sistemas de agua potable, destruyendo motores y mangueras, por lo que se ha asistido a los afectados con la entrega del recurso vital. “En un principio colocamos un acumulador donde les llevamos el agua a las familias, mientras hacemos las otras instalaciones de los motores y las mangueras que cada familia tenía”, añadió.
Desde Quirihue destacaron la eficiencia del proceso en la entrega de los inmuebles de emergencia comprometidos por el gobierno, ya que la totalidad ya fueron construidos. Sin embargo, tal como en la mayoría de las comunas, se requieren las conexiones adecuadas para que puedan ser utilizados.
“Ahora estamos en un proceso de instalar los servicios básicos como alcantarillado y agua potable para que queden totalmente habilitadas”, dijo el alcalde, Richard Irribarra.
Según la autoridad, en la comuna fueron requeridas 22 casas provisorias, pero 10 fueron priorizadas por el Gobierno por ser primera vivienda, el resto, que corresponderían a segundas unidades habitacionales, se están gestionando con la Fundación Techo.
“Creo que lo primordial en este momento es agilizar con el Serviu para que se puedan otorgar a estas familias las viviendas definitivas y no tengan que esperar un año o más para que puedan volver a vivir en condiciones dignas”, enfatizó.
A partir de ayer sábado El Carmen recibiría las primeras viviendas de emergencia de las cinco que finalmente calificaron para los criterios de entrega.
En palabras del alcalde José San Martín, los daños más graves de los incendios que consumieron 3 mil hectáreas, están en las estructuras productivas como galpones, bodegas y cercos, lo que deja con mucha inseguridad a los propietarios.
“Porque queda todo abierto y la gente quiere hoy seguridad (…) Tenemos como 76 kilómetros lineales de cerco para los más pequeños, igual es cara la construcción. Esperamos que Indap nos haga un aporte, porque el año pasado también tuvimos un incendio y nos aportaron con polines y alambres, esperamos que este año lo puedan repetir porque son otros sectores”, mencionó el jefe comunal.
En Quillón, 162 viviendas se contabilizan como afectadas por los incendios forestales. Senapred asumió la entrega de 101 casas provisorias, de las cuales diez ya fueron instaladas, aunque a la espera de la implementación de la fosa séptica. Por parte del municipio, se comprometieron diez, siendo hasta cuatro las levantadas, y según informaron, se está gestionando la instalación de 20 más.
Los incendios afectaron, además, seis sistemas de agua potable en la comuna, los cuales han sido reparados progresivamente. Tres sistemas están en pleno funcionamiento (Quitrico, Palermo y Coyanco), dos activados al 50% (Santa Ana de Caimaco y San Ramón) y uno por reparar (Las Perdices).
“Los sectores que no cuentan con su APR al 100% están siendo abastecidos por camiones aljibe. El municipio ha instalado 10 puntos de agua potable en la comuna, para que los vecinos tengan un lugar donde abastecerse. Además de eso, ya se han entregado más de 120 estanques a distintas familias”, informaron desde el municipio.
La Unidad de Emergencias está gestionando de manera directa las conexiones con las empresas proveedoras para hacer más corto el proceso. El servicio eléctrico ha sido repuesto de manera amplia en toda la comuna. Por ahora, se trabaja en las conexiones individuales y los empalmes que están pendientes y se gestionan junto a la reconstrucción.
En Chillán Viejo, los incendios forestales afectaron los sectores de Las Raíces (Quilmo) y Caserío Linares (Rucapequén), donde ocho viviendas resultaron con pérdida total.
Durante esta semana los equipos en terreno han evaluado la factibilidad técnica para las soluciones particulares de las casas de emergencia que llegarán la próxima semana.
“Esperamos que en la próxima semana tengamos la instalación de las viviendas de emergencia a todas las familias que perdieron su casa-habitación. Hoy tenemos dos complicaciones, estamos buscando los caminos para ayudar de mejor forma lo que tiene que ver con la pérdida de las casas patrimoniales y los viñedos que producto del fuego se quemaron por completo. Esperamos que todo esto esté ocurriendo por parte nuestra y que con oportunidad llegue la ayuda del gobierno, a través de estas viviendas de emergencia con todos los implementos tanto de agua potable como fosa”, expresó el alcalde, Jorge del Pozo.
A juicio del alcalde de Yungay, Rafael Cifuentes, la fase administrativa del proceso de recuperación, respecto a las encuestas y catastros, fue ágil en la comuna. Sin embargo, la entrega de las viviendas requeridas ha sido un “poco más lenta”.
“Este sábado debería llegar a las 8 de la mañana la empresa a instalar las primeras. Para la comuna fueron asignadas 19 y este sábado van a llegar cuatro, de aquí al lunes deberían estar instaladas, por lo que nos dijo la empresa”, precisó.
En Portezuelo, los incendios causaron daños en los sectores de Buenos Aires y Huacalemu.
El alcalde, René Shuffeneger, informó que en “el primer incendio se perdieron siete viviendas que están totalmente reconstruidas, falta solo que le instalen la fosa séptica, y en el segundo se perdieron cuatro viviendas, ahí aún no comienza”.
La Discusión efectuó reiterados llamados a los alcaldes de Coelemu y Trehuaco, pero hasta el cierre de esta edición no fue posible establecer contacto.