La Ruta del Itata, principal vía de conexión entre Ñuble y el Gran Concepción, dejará atrás el sistema tradicional de cobro en plazas de peaje para dar paso al mecanismo electrónico free flow.
Según confirmó el Ministerio de Obras Públicas, la medida comenzará a operar el 1 de octubre de 2026 y permitirá que los vehículos transiten sin detenerse, utilizando el mismo dispositivo TAG que se emplea en otras carreteras concesionadas del país.
Este cambio implicará el retiro definitivo de las casetas de cobro, agilizando los tiempos de viaje y evitando las filas que actualmente se generan en los peajes.
El TAG será de carácter universal, por lo que podrá utilizarse también en futuras obras como el Puente Industrial sobre el Biobío, lo que ampliará la interoperabilidad del sistema en la zona centro-sur.
Según confirmaron desde la Seremi de Obras Públicas del Biobío, esta modernización corresponde “a obras tempranas” de la ruta.
“Tienen que ver con un cambio en el sistema tecnológico de pago en la Ruta del Itata que va a pasar a ser a través del sistema free Flow. Veremos eliminadas las plazas de peajes que tenemos hoy en día y va a pasar a los pórticos de cobro”, indicó el seremi del MOP en Biobío, Hugo Cautivo.
Indicó que los automovilistas “van a pagar solo por aquel tramo de kilómetros recorridos, cosa que también era un tema muy demandado por la comunidad. Eso es parte de los compromisos y la idea es que el 1 de octubre de 2026 ya esté plenamente operativo este sistema de free flow”.
Obras complementarias
Si bien aún queda más de un año para que el sistema free flow comience a funcionar, se siguen realizando diversos trabajos complementarios de la ruta, enfocadas, sobre todo, en seguridad.
En ese sentido la concesionaria Sacyr ejecutará 30 obras de mejoramiento en la ruta antes de fin de año. Entre ellas, se contempla la instalación de pasarelas, bahías y puntos de detención para paraderos, además del esperado enlace que conectará Chillán con la comuna de Florida.
Estas intervenciones, señaló el seremi Cautivo, buscan elevar los estándares de seguridad y servicio para los usuarios de la ruta.
“Lo que tenemos seguro hoy en día, porque esto debe ser evaluado por la dirección general de concesiones, es que dentro de los próximos 30 días la concesionaria va a entregar todo lo que son las ingenierías básicas de todas estas obras, que en total llegan a 30, para que puedan ser evaluadas por la asesoría fiscal y la inspectoría de concesiones”, sostuvo la autoridad.
Una vez con la autorización, agregó Cautivo, “se espera que durante el último trimestre de este año ya empiece la ejecución de obras”.
La modernización del sistema de cobro y las mejoras de infraestructura responden a la creciente demanda de conectividad entre Ñuble y el Biobío. Esto con miras a la seguridad vial, que muchas veces es criticada por ser ineficiente en algunos tramos.
Nueva concesión
Las obras de mejoras e innovaciones tecnológicas que se aplicarán al tráfico vehicular, forman parte de las primeras iniciativas de la empresa española Sacyr Concesiones, que comenzó a operar la segunda concesión de la autopista desde el pasado primero de abril y que se extenderá por 540 meses con una inversión de 564 millones de dólares.
En la parte de Ñuble, entre los trabajos a desarrollar por la nueva concesionaria, está la rectificación del giro en el enlace Pablo Neruda, en el cual el ingreso a Chillán será con viraje hacia el sur y no hacia el norte como es actualmente, junto a la construcción de los nuevos enlaces Rucapequén y Ránquil, además de 4 pasarelas peatonales, en los sectores de Quinchamalí, Confluencia, Ránquil y sumaremos un paso peatonal y ciclovía en el puente sobre el río Itata en el kilómetro 20,1.
Se incluye, además, la construcción de paraderos con circuitos peatonales, iluminación y accesibilidad universal en el sector de Colliguay, Quinchamalí, Confluencia, La Cantera, Rucapequén, Nueva Aldea, Carrizales, Peñablanca, Ránquil y en el kilómetro 36,5 sector El Milagro, en el límite regional. Adicionalmente se incorporarán elementos de seguridad como Cámaras de Televigilancia y circuito cerrado de TV y una nueva área de servicios generales y nueva área de atención de emergencias, además de iluminación.
