En la Sala Schaefer del Centro de Extensión de la Universidad del Bío-Bío, en Chillán, se realizó el seminario “Nuevo Instrumento de Financiamiento Público para la Educación Superior (FES)”, organizado por la Corporación de Universidades de las regiones de Biobío y Ñuble, junto a la Comisión de Educación del Senado.
La instancia congregó a autoridades universitarias, parlamentarias y del Ministerio de Educación, con el objetivo de analizar los alcances del proyecto de ley que busca reemplazar al Crédito con Aval del Estado (CAE).
El presidente del Cruch Biobío-Ñuble y rector de la UBB, Benito Umaña, expresó que existe un amplio consenso respecto de que el sistema vigente “ha demostrado ser insostenible fiscalmente y ha significado un alto nivel de endeudamiento para miles de familias”. En ese marco, explicó que el FES surge como una alternativa que elimina la intermediación bancaria y propone un mecanismo de retribución más solidario, aunque advirtió que el debate sigue abierto y enfrenta desafíos relevantes en el Senado.
Desde el ámbito legislativo, el senador Gustavo Sanhueza, presidente de la Comisión de Educación, resaltó la realización del seminario en regiones y destacó la importancia de escuchar a todos los actores del sistema.
A su juicio, la diversidad de visiones -universidades, institutos profesionales y centros de formación técnica- enriquece la discusión y permite avanzar hacia decisiones más informadas.
“Hay que legislar”
Uno de los momentos centrales de la jornada fue la ponencia del rector de la Universidad de Concepción, Carlos Saavedra, quien presentó cifras comparativas entre el CAE y el FES, enfatizando la urgencia de legislar.
A partir de proyecciones fiscales elaboradas por la Dipres, sostuvo que incluso en escenarios extremos, el nuevo instrumento resulta más conveniente para el Estado.
“Aunque lográramos una retribución cero, este instrumento es mejor que el CAE”, afirmó, resaltando que el actual modelo generó una expansión no regulada del sistema, con altos costos fiscales.
Saavedra recalcó que el FES permitiría reducir de manera significativa el gasto proyectado a largo plazo y llamó a observar el debate con “honestidad intelectual”, considerando el cuidado de las finanzas públicas.
No obstante, planteó que el proyecto requiere ajustes, especialmente en materias como la autonomía universitaria, el financiamiento integral y oportuno de las instituciones, y una implementación sostenible.
El subsecretario de Educación Superior, Víctor Orellana, destacó el seminario como un aporte al diálogo necesario para construir consensos amplios.
Reconoció la complejidad de la legislación en educación superior y aseguró la disposición del Ejecutivo a escuchar y flexibilizar posiciones para alcanzar acuerdos que respondan a las necesidades del país.
Desde el subsistema técnico-profesional, el presidente de Vertebral Chile y rector del CFT San Agustín, Sergio Morales, enfatizó que cerca del 50% de la matrícula corresponde a este sector, por lo que el mecanismo de reemplazo del CAE debe reflejar sus particularidades y trayectorias formativas.
La jornada incluyó un panel moderado por la vicerrectora de la UdeC, Paulina Rincón, que permitió contrastar las miradas del Ejecutivo, el Legislativo y las distintas instituciones de educación superior. En ese espacio, se coincidió en la necesidad de perfeccionar el proyecto y avanzar hacia un sistema de financiamiento más justo, sostenible y acorde a la diversidad del sistema, con impacto directo en estudiantes actuales y futuros.
