El martes 23 de julio, la comuna de San Carlos hizo noticia debido a la muerte de un hombre de 64 años, quien fue usado como escudo humano, por un grupo de delincuentes, quienes ingresaron al local Sencillito, ubicado en calle Ernesto Riquelme. El locatario disparó para repeler el asalto, siendo el cliente quien recibió el disparo.
La detención de la banda, a segundos de cometido el atraco, no fue suficiente para calmar a la alterada comuna, que a través de los gremios del comercio y del Concejo Municipal, han advertido que lo de la inseguridad en San Carlos ya es crisis.
Y el tema aún era comentado en las calles de la capital del Punilla, cuando -por insólito que parezca- un nuevo asalto ocurrió en esa misma calle. Esta vez el local vecino al Sencillito.
Un video que circuló por redes sociales da cuenta del actuar de un hombre y una mujer, quienes a rostro descubierto comienzan a llenar bolsos con productos de ese emporio, sin que los exiguos esfuerzos de la joven encargada de la tienda pudiera contra la determinación de los delincuentes.
“Acá en San Carlos, las personas del comercio en lo único que piensan es en que cuándo les va a tocar a ellos”, acusa el concejal de esa comuna, Jorge Silva.
El edil admite los esfuerzos municipales por potenciar los patrullajes, pero sostiene que “el municipio no puede asumir las tareas de Carabineros”; y aunque da fe de la utilidad de las 14 cámaras de televigilancia instaladas en esa ciudad, critica el que “no haya una sala espejo, para esas cámaras, es decir, no son vigiladas por Carabineros, quienes tienen mayor experticia para esas tareas”.
Paralelamente, el mismo día martes en que ocurrió el hecho en el Sencillito, otra banda integrada por dos gemelos adolescentes y un adulto (José Salinas Vásquez), ingresaron a robar a una casa particular, siendo detenidos por Carabineros. Uno de ellos, en mayo pasado, asaltó a una mujer, a la salida de una Caja Vecina, a quien golpeó y le robó 20 mil pesos.
Solo el adulto quedó privado de libertad.
