Señor Director:
El canal de riego Chacayal sufrió graves daños a causa de la crecida del rio Ñuble el fin de semana del 24 de junio,
dichos daños consisten en la destrucción de la bocatoma y parte del canal, socavamiento del revestimiento del canal,
destrucción de obras hidráulicas, etc. Y tal como se informó en La Discusión del día jueves 29 de junio, entre 70 a 80%
de los canales de riego de nuestra región corrieron una suerte similar.
Si los daños de los canales de nuestro país no se reparan para la temporada de riego, o sea a más tardar a finales de
septiembre, se arriesga bajar la producción de los sembrados y plantaciones, lo cual repercutirá negativamente en los
consumidores al aumentar el precio de los alimentos y generando un nuevo “shock” inflacionario que afectara a toda
la economía del país.
Además de castigar nuevamente a los agricultores, los cuales ya han sido afectados por el alza de los insumos, la
baja de los precios de sus productos y la sequía de los últimos 15 años.
Es de esperar que se cree una colaboración sinérgica público-privada para reparar, en tres meses como máximo, los
daños en la infraestructura de riego de nuestro país en beneficio de los consumidores, agricultores, el Estado y para
que volvamos a trabajar para ser una “potencia agroalimentaria”.
Francisco Contreras Jeldres
Presidente de la Asociación de Canalistas del canal Chacayal