Luego de 23 días bajo la medida del toque de queda, hoy el general jefe de Defensa a cargo de la emergencia en Ñuble, Jorge Salinas, decretó el fin de la restricción a la totalidad de las comunas que estaban bajo esta normativa desde el pasado 8 de febrero, día en que el Presidente Gabriel Boric informó que se implementaría la medida por el estado de emergencia que ocurría a causa de los incendios forestales.
Mediante un documento emitido este viernes, Salinas expresó que termina la medida para Quillón, en la Provincia de Diguillín; Coelemu, Ninhue, Trehuaco y Portezuelo en la Provincia de Itata; y San Fabián y Coihueco en Punilla, estas dos últimas comunas agregadas el 19 de febrero, debido a los últimos focos que se generaron en ambos territorios.
Jorge Salinas encabezó esta decisión, además de realizar un balance general de la emergencia, que comenzó con el estado de catástrofe constitucional el 3 de febrero pasado. El general destacó el trabajo hecho y comentó que están muy contentos debido a la situación actual de los incendios, puesto que la “evolución ha sido muy favorable para la región, ya que no tenemos mayores problemas con respecto a eso y tampoco hemos tenido focos nuevos de importancia, así que con respecto a eso el balance es muy positivo”. Consultado por el balance del toque de queda, detalló que “no hubieron grandes problemas relacionados con esta normativa, no hemos tenido una mayor cantidad de gente, ni de conducidos a unidades policiales, ni denuncias al respecto con problemas graves. Solamente salvoconductos y cosas por el estilo, pero nada que salga de lo común al margen de lo delincuencial que pudiese tener la región, así que estamos muy contentos con eso”.
De esta manera, la medida dejó de regir a las 00.00 horas de este sábado, normativa que también se bajó en todas comunas de la región del Biobío, a excepción de Tomé, que sigue bajo ella debido a algunos focos que siguen activos dentro de la comuna.
Estado de excepción
Además, al cierre de esta edición, la Delegación Regional confirmó que el estado de excepción para la Región de Ñuble se extiende por 30 días más.
En ese contexto, para continuar articulando trabajos que vayan en directa ayuda de las familias afectadas por los incendios forestales, el delegado presidencial Regional de Ñuble, Gabriel Pradenas, recibió a su par de La Araucanía, José Montalva, junto a la delegada presidencial para la Reconstrucción, Paulina Saball, y el subsecretario de la Subdere, Nicolás Cataldo.
Tanto Ñuble como La Araucanía se vieron afectadas por la emergencia de los incendios que dejaron 52.472 y 108.388 hectáreas consumidas respectivamente.
El delegado presidencial Regional de Ñuble, Gabriel Pradenas, expresó que “desde antes de la emergencia, una de mis tareas ha sido generar articulación territorial e institucional, cruzando las fronteras de las regiones para potenciar una articulación en materia de seguridad pública. Dichos elementos fueron alcanzados por la emergencia, pero hoy seguimos articulando institucionalmente, en esta oportunidad con la DPR de La Araucanía con la Región de Ñuble, pensando en la conmutatividad de recursos respecto a la emergencia, es decir, la capacidad integral que tenemos para responder y apoyarnos entre regiones es fundamental, y para ello estamos trabajando y consolidando un proyecto que fortalece el plan de recuperación para Maule, Ñuble, Biobío y La Araucanía”
El delegado Pradenas agregó que “precisamente en ese foco queremos potenciar a través de esta misma articulación, en miras de poder gestionar todos los recursos disponibles, no solamente para el combate de incendio sino que también para el resto emergencia, para que también podamos enfrentar el invierno y por supuesto todo lo que se refiere a reconstrucción junto a la delegada presidencial para la Reconstrucción, Paulina Saball y, por supuesto, el Subdere Nicolás Cataldo, que va a tener un rol muy importante desde el Gobierno central para generar está articulación y maximizar los recursos disponibles”.
Texto: Diego Chacana
