Cables colgando y personas evitando el contacto con ellos en la intersección de calles El Roble y 5 de Abril fue unas de las postales de este lunes en el centro de Chillán. El sector, que fue intervenido con retiro de cables en desuso en el primer semestre de 2019, provocó incomodidad y extrañeza en automovilistas y transeúntes.
“Es una preocupación muy grande que hemos tenido los dirigentes y vecinos en general de la ciudad. Es un peligro para todos los transeúntes si se corta un cable o si hay alguna dificultad. Además, hay un tema de estética. Las empresas se han dedicado a instalar cables y ni siquiera a retirar los anteriores”, afirmó Cecilia Henríquez, presidenta de la Unión Comunal de Juntas de Vecinos Chillán.
De parte del municipio, Domingo Díaz, jefe del Departamento Eléctrico del Departamento de Obras Municipales (DOM), comentó que “se supone que en esa esquina fueron retirados los cables en desuso. Nosotros empezamos a principios de año 2019 la etapa de retiro en el centro de Chillán. La primera etapa comprendió desde Bulnes hasta Maipón y de 18 de Septiembre hasta Isabel Riquelme. Concluyó a mediados de 2019. La segunda etapa en septiembre de 2019. Después, el último proceso debió haber estado terminado a fin de 2019, pero se atrasó por el 18 de octubre. Pero, la mayor parte está hecha”.
A la fecha van 3.437,5 kilos de cables retirados, que equivalen a casi 40 kilómetros de largo.
Los trabajos sobre retiro de cables en desuso están bajo una ley que obliga a las empresas a realizar el retiro. Sin embargo, el encargado municipal afirma que se ha transformado en un tema que dificulta el plan de retiros actual planeado para marzo de este año: “Hay puntos que tenemos que revisar. En varios puntos no estoy conforme con lo que se hizo, pero de repente hay cables de nadie. Hay cables que ninguna empresa reconoce porque son antiguos. Son tan viejos que nadie reconoce ni se hace cargo de eso. Muchas empresas han ido mutando, por lo tanto están en tierra de nadie. Eso es lo que estamos viendo, cómo solucionarlo porque en un momento Movistar me dijo que se iba a hacer cargo de los cables de la Compañía de Teléfonos de Chile, antigua CTC. Cada una de estas empresas debiera tener un color en su acometida, es decir, son negros, pero con un color específico. Sin embargo, quedan algunas negras que son antiguos”.
Pese a la complejidad, el municipio maneja opciones: “Nosotros tenemos una ordenanza que está en pañales para obligar que aquellas empresas marquen los cables que no tienen marcados, de manera de que podamos retirar los cables que no son de nadie. Ahí tendría una justificación para el retiro”, afirmó Díaz.
Actualmente los trabajos se encuentran pausados por vacaciones del personal de las empresas a cargo. Sin embargo, desde el municipio aseguran que serán retomados en marzo para terminar con lo restante dentro de las cuatro avenidas y evitar episodios como el de este lunes. A su vez, afirman que ya planean nuevos lugares de retiro fuera del centro.