Señor Director:
La semana pasada, SENDA dio a conocer un estudio que consignó que el consumo de alcohol en la población alcanzó su cifra más baja desde 1994, con un 39%. Además, la ingesta en menores de 12 a 18 años también descendió notablemente, situándose en un 27% en comparación con el 57% del 2020.
Los números resaltan el trabajo mancomunado del mundo público y privado en materia de prevención y fomento de un consumo responsable. Es evidente que los esfuerzos dirigidos a prohibir las bebidas con alcohol en grupos de riesgo, como menores, conductores y embarazadas, han sido fructíferos.
No obstante, es fundamental no bajar la guardia, especialmente de cara a las festividades de fin de año, potenciando campañas como “Ni Una Gota” en grupos de riesgo, impulsada por Aprocor, junto con aquellas de SENDA, Conaset y otras organizaciones que contribuyen significativamente a enfatizar en los daños, riesgos y creencias erróneas en torno a la ingesta de bebidas con alcohol.
En términos de mercado, la reducción en los adultos también podría atribuirse a un fenómeno de “premiunización” del consumo, es decir, preferir productos de mayor calidad y beber en cantidades moderadas, un cambio que se vincula a una cultura más consciente. Este 2023 ha representado grandes desafíos para la industria de espirituosas por la contracción económica y la inflación. Pese a estos obstáculos, existen espacios para seguir creciendo y, a la vez, promover el consumo prudente. Buenas noticias que nos alientan a seguir trabajando.
Juan Pablo Solís de Ovando
Presidente Espirituosos Chile