Fue en abril de 2016 cuando se anunció que gracias a un decreto que creaba nuevas notarías y conservadores de Bienes Raíces en comunas como Bulnes, Coihueco y Pinto, que la esperanza en estas localidades era la de poner fin a los viajes de sus vecinos hasta Chillán para realizar las respectivas tramitaciones, que ni siquiera para los propios chillanejos tienden a resultar expeditas.
A comienzos de marzo, cuando asumió Guillermo Arcos la presidencia de la Corte de Apelaciones de Chillán, se gestó este desafío personal que hoy da el primer gran paso.
Entre otros beneficios, se destaca que “por sobre todo, se busca un beneficio directo para la población de estas tres comunas, porque se presentan características que son particulares, y es que existen agroindustrias, cuyos empleos son temporales. O sea, se requiere de un ministro de fe para firmar el contrato y también para los finiquitos”, dijo en esa oportunidad, el ministro Guillermo Arcos.
Pese a esto, cinco años y cinco meses después del anuncio, ni Coihueco ni Pinto cuentan con sus notarías y conservadurías; y aunque en el caso de Bulnes hace años que existe esta oficina, aún no se ha podido nombrar a su titular.
La razón de esto se puede explicar por dos vertientes, y la primera de ellas es la de un “error” en la redacción del decreto de 2016.
Conforme al ministro Arcos, “el problema con las notarías de Bulnes, Pinto y Coihueco es que la ley que las creó, estableció que serían notarías de primera categoría las que solo corresponden a las que se crean en ciudades de asiento de Corte”.
De esta manera, solo podrían crearse en la capital regional, ya que es la única comuna que cuenta con una Corte de Apelaciones en Ñuble.
De esta manera lo que se intentó hacer fue establecer notarías y conservadurías de Chillán con “asiento en Bulnes, Coihueco y Pinto”. Pero esto no dio resultado.
“Al ser notarías de la primera categoría, las ternas con los interesados deben conformarse con los notarios de la categoría inmediatamente inferior y con dos oponentes de la misma categoría, esto es de ciudades de asiento de Corte, lo que ha dificultado en estos momentos, la conformación de las ternas por falta de interesados que cumplan estos requisitos”, completó el magistrado Arcos.
Luego, como segunda razón de la suspensión de estos nombramientos, asoma lo que la propia seremi de Justicia de Ñuble, Jacqueline Guíñez, dijo a La Discusión en noviembre de 2020, cuando adelantó que el Gobierno estaba estudiando la posibilidad de crear la figura del fedatario, para reemplazar a los notarios en localidades menores.
La figura del fedatario se basa en otras existentes en el extranjero, principalmente en países como Estados Unidos, y corresponde a oficinas en las que se pueden realizar algunas de las tramitaciones más comunes, pero al mismo tiempo menos complejas que las se realizan en las notarías. Para graficarlo de mejor manera, en todo el país se habla de que el nuevo fedatario hará el trabajo que se realiza cotidianamente “en el mesón” de las notarías.
La razón es que “la idea es que avancemos a este proyecto de oficinas fedatarias, más que estar abriendo nuevas notarías. Lo que queremos es avanzar a una desnotarización”, afirmó Jacqueline Guíñez, en esa oportunidad
Reunión con el ministro
El alcalde de Pinto, Manuel Guzmán, para quien el tema es particularmente urgente, toda vez que están en un proceso de diseño del nuevo Plan Regulador Comunal, que actualmente se encuentra en la etapa de evaluación de la propuesta de su Imagen Objetivo, sostuvo una reunión con el diputado Jorge Sabag, quien se comprometió a reunirse con el ministro de Justicia, Hernán Larraín, “para que se pueda hacer la modificación necesaria al decreto”, explicó.
El parlamentario añadió que “no hay interesados en este llamado a concurso porque como está hecho el decreto, debe haber interesados que ya sean notarios en asientos de Corte y lo más probable es que no le interese cambiarse a una notaría más pequeña”.
Sabag estima que si prospera la solicitud tras la reunión con el ministro, puede que el decreto se logre modificar, crear las ternas y nombrar a los nuevos notarios y conservadores antes de que culmine el actual Gobierno, en marzo de 2021.
El alcalde Guzmán precisó que este plazo sería óptimo porque “somos una comuna que tiene un alto nivel de transacciones dado que somos una comuna turística y hay mucho movimiento en temas de corretaje”
Pronto a modificar los límites urbanos producto del Plan Regulador, “esto podría significar más movimientos en temas de ventas, subdivisiones y transacciones y esperamos que cuando termine el proceso del Plan Regulador, la notaría ya esté funcionando”, concluyó.
