Señor Director:
Por su excelente campaña de vacunación y por su estrategia de testeo, trazabilidad y aislamiento, Chile ha sido un ejemplo global en el manejo de la pandemia del Covid-19. Incluso, el ranking Bloomberg situó a nuestro país como el mejor para vivir en pandemia. Sin embargo, no se puede cantar victoria. Las nuevas variantes han puesto en jaque a varios países que tenían la situación sanitaria pseudo controlada, aumentando los casos y las muertes. Ante este escenario, la OMS ha pedido que las fiestas de fin de año se celebren sin grandes aglomeraciones.
Por esa razón, resulta incomprensible que la alcaldesa de Viña del Mar, Macarena Ripamonti, y el alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp, sigan promocionando actividades en sus comunas que generarán importantes aglomeraciones para la noche de Año Nuevo.
Urge que se realicen campañas de autocuidado que permitan mitigar los riesgos. De lo contrario, ellos serán los principales responsables si es que existe un aumento de casos en la región de Valparaíso.
Josefa Hernández G