La propuesta para implementar una Zona Económica Especial (ZEE) Agrícola en Ñuble, que ha sido levantada por los gremios productivos de la región, sigue sumando apoyos, esta vez, del senador Gustavo Sanhueza, luego de reunirse con los presidentes de la Cámara Chilena de la Construcción-Chillán (CChC), Ricardo Salman; de la Asociación de Agricultores de Ñuble, Carlos González; y de la Cámara de Comercio de Chillán, Alejandro Lama; y con el director de Desarrollo Económico y Productivo de la Municipalidad de Chillán (Didepro), Renato Segura.
El respaldo del parlamentario se suma al expresado una semana atrás por la senadora Loreto Carvajal.
“Fue una reunión muy positiva, en la medida que podamos avanzar en acciones concretas para que esta Zona Económica Especial, focalizada en la creación de valor para la pequeña agricultura, nos permita un desarrollo efectivo de Ñuble”, expresó el senador.
Añadió que, “la idea de articular diferentes políticas públicas al alero de una visión común de una región potencia agroalimentaria, va en el sentido correcto. Y eso implica mejorar la capacidad de riego, avanzar en una mejor conectividad, atraer inversiones, fomentar la creación y desarrollo de clusters, orientar la oferta educativa en áreas donde tenemos una ventaja comparativa, entre otras dimensiones. La ZEE es una gran unidad de negocios que nos permite, desde hoy, focalizar esfuerzos y evitar la dispersión de iniciativas que finalmente no responden a un denominador común”.
En esa línea, Renato Segura, explicó que la propuesta “consiste en presentar una estrategia común (el mundo civil, el mundo público y el mundo productivo) para utilizar la ZEE Agrícola como una herramienta de gestión pública que introduzca mejores regulaciones, políticas y procedimientos administrativos para estimular la actividad económica de nuestra región”.
Por su parte, Ricardo Salman, destacó que “la implementación de una ZEE podría acarrear grandes beneficios para la región, abarcando tanto al sector agrícola como al industrial, comercial y logístico. Este instrumento podría desempeñar un papel crucial en la reducción de las disparidades regionales, al generar polos de desarrollo que fomenten e impulsen inversiones capaces de agregar valor a nuestros productos”.
Pasos a seguir
Sanhueza subrayó que “es una tarea de largo plazo, pero que debemos impulsarla con perseverancia y hechos concretos ahora, tanto desde la sociedad civil como desde las autoridades actuales que están mandatadas para liderar y articular esta excelente propuesta”.
“Vamos a apoyar en todo lo que sea necesario, desde el punto de vista legislativo y a través de las diferentes coordinaciones con los ministerios para materializar esta iniciativa. El acuerdo al que llegamos en esta reunión, es poder tener en 30 días una propuesta inicial, con acciones concretas, que nos permitan articular esfuerzos políticos y financieros. Es muy importante tener en cuenta que la Zona Económica Especial debe ser un instrumento que vaya más allá del gobierno de turno, con sentido estratégico y que sea finalmente la sociedad civil la que impulse y de forma a todas las iniciativas”.