Un significativo aumento de incendios se han registrado desde el 1 de julio a la fecha en la macro zona forestal, correspondiente al territorio entre las regiones de O’Higgins y Los Lagos, donde se han producido 807 emergencias, cifra que supera todos los registros para igual período del 2016 en adelante, según estadísticas del Sidco (Sistema de Información Digital para Control de Operaciones).
Los incendios del actual período 2020-2021, representan un aumento explosivo del 89% de ocurrencia, en relación al promedio del quinquenio 2016-2020, que es de 428 incendios.
De estos 807 incendios, un 34% ha sido intencional, un 19% corresponde al uso de fuego por transeúntes, 28,5% a otros actos de negligencia humana, 18,3% causa indeterminada y 0,1% factores naturales.
El presidente de Corma, Juan José Ugarte, señaló que “la curva de cantidad de incendios es muy alarmante cuando comparamos las últimas 5 temporadas en la zona centro sur del país, siendo la actual la que lidera con 807 incendios rurales, que han afectado 1.312 hectáreas”.
Agregó que “otro dato que impresiona, es que el promedio en noviembre es de 19 incendios diarios en la macro zona, por lo que hacemos un llamado a la ciudadanía a extremar todo tipo de precauciones, ante un escenario muy complejo con altas temperaturas que facilita la propagación de cualquier incendio”.
Corma es parte de una alianza estratégica público-privada que integran el Ministerio de Agricultura, Conaf, Onemi, Bomberos, Carabineros, PDI, municipios, gobiernos regionales y Red de Prevención Comunitaria, para prevenir la ocurrencia de incendios y coordinar los esfuerzos y recursos para combatir los siniestros que se produzcan en zonas con vegetación.
Para enfrentar esta temporada, las empresas forestales han capacitado a más de 4.500 personas entre brigadistas forestales, torreros, y encargados de logística aérea y terrestre, para atender las demandas y evitar el daño que puedan causar los siniestros en la macrozona forestal, y en especial salvaguardar la vida de quienes viven en zonas de interfaz.
A todas estas personas se les está aplicando estrictamente el protocolo Covid, que incluye: uso de la mascarilla permanente, constantes chequeos con tomas de temperatura y exámenes PCR, sumado a sanitizaciones del transporte terrestre y aéreo y espacios de alimentación y alojamiento.