El presidente de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) sede Chillán, Jorge Figueroa Moreno, expresó su preocupación por el alza explosiva de los costos de materiales, además de problemas de escasez de mano de obra y quiebres de stock, lo que dijo, está afectando la viabilidad de los proyectos de viviendas de interés social, razón por la que planteó la necesidad de que el Ministerio de Vivienda “restituya el equilibrio económico de estos contratos”.
El líder gremial explicó que “dadas las restricciones sanitarias impuestas por la pandemia en el mundo se generó una considerable contracción de la oferta internacional de materias primas. Por otra parte, la reactivación ha generado un gran impacto en los precios, los cuales incluso superan el 400% en al caso de la madera”.
“A partir del levantamiento de estas restricciones sanitarias impuestas en Chile durante el primer semestre de 2020, se observó un inédito aumento en la demanda de materiales. Los retiros de fondos de pensiones y el interés de las familias por hacer trabajos de mejoras en sus viviendas hicieron que la demanda de materiales creciera hasta en un 47% en estos últimos meses. Adicionalmente a esto, se experimentan a diario una serie de dificultades que generan una pérdida de productividad en las obras, como los actos de autoridad, la escasez de mano de obra, el alza de precios y quiebres de stock de materiales y extensión de plazos en los contratos, variables que configuran un escenario de extrema complejidad para la operación de las obras”, describió Figueroa.
En esa línea, el dirigente advirtió que “ante este escenario de sobrecostos que atraviesa la industria, muchas empresas no han podido iniciar sus obras. Según el último catastro realizado por la CChC de la región del Biobío, a marzo de 2021 se daba cuenta de 307 proyectos (programas como DS19 y DS49) que no han podido dar inicio a sus obras, siendo una de las principales causas los sobrecostos que experimenta el mercado. Lo anterior compromete la ejecución de 55.859 viviendas dirigidas a familias que necesitan de la ayuda estatal para acceder a una solución habitacional”.
Según Figueroa, “los sobrecostos sobrepasan considerablemente las utilidades de los proyectos, lo que generará en el corto plazo una situación de insolvencia en las empresas que conforman esta industria. Esto dañará irremediablemente el motor de reactivación que tiene nuestra economía impidiendo la generación de empleos y poder atender las necesidades básicas de viviendas de las familias más vulnerables de nuestro país”.
Ministerio de Vivienda
“Hoy vemos -continuó- cómo importantes empresas constructoras quiebran, cómo las obras se atrasan, impidiendo que los beneficiarios puedan lograr su anhelada vivienda. Las empresas simplemente no son capaces de hacerse cargo de los sobrecostos que hoy experimenta la construcción. De esta forma, es absolutamente necesario que el Ministerio de Vivienda restituya el equilibrio económico de este tipo de contratos de manera urgente, con el objeto de que las empresas puedan construir viviendas sociales”.
El timonel de la CChC Chillán planteó que “el Ministerio de Vivienda y Urbanismo tiene la alternativa de solucionar este problema aplicando los artículos 27 y 34 del Decreto Supremo 49, para los proyectos en ejecución y también para las viviendas que están en etapa de postulación. Por eso creemos que el diálogo con sentido de realidad es la mejor herramienta para enfrentar esta crisis, debemos entender que esta pandemia y sus enormes consecuencias no estaba en el cálculo de nadie”.
“El entendimiento y reconocer la crisis que está viviendo el rubro de la construcción es la clave para construir acuerdos equilibrados en este escenario de desmedro para empresas que aportan al país a través de la construcción de la vivienda social”, cerró Figueroa.