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El pasado 13 de agosto, tras una semana dramática en términos delictuales, el jefe de la Primera Comisaría de San Carlos, mayor Christian Muñoz, daba cuenta que el 10% de la totalidad de detenidos dentro de su jurisdicción policial en 2024, eran menores de edad. En detalle, eran 57 menores los detenidos.
La denuncia del mayor fue atendida por diversos medios locales y nacionales, los que a raíz de esto, ahondaron en el fenómenos, estableciendo que en el país, cerca del 6% de los detenidos tenían entre 14 y 17 años de edad, durante este año.
Pese a que a partir de entonces, se realizaron mesas de trabajo, reuniones entre Carabineros, las autoridades de educación y la Municipalidad de San Carlos, el fenómeno parece no dar tregua. Tres semanas después, la cifra de adolescentes detenidos subió a 67 en la capital de El Punilla, llegando a 67 casos en estos nueve meses del 2024.
“Lo que hemos observado es que muchos adolescentes comienzan a imitar estos modelos, porque notan que existe una recompensa inmediata, que es el dinero, con este tipo de actos delictuales, pero eso está reforzado por la idea que se tiene respecto a que por el hecho de ser menores de edad, no les va a pasar nada si se les detiene”, explica el mayor.
Para contrarrestar esta situación, “hemos estado visitando los establecimientos, nos hemos reunido con los centros de padres y los centros de alumnos, para mostrarle con cifras y hechos cercanos, que eso no es así, que hay adolescentes de esta ciudad que están privados de libertad”.
Pero el mayor no desconoce que el tema no es tan simple.
“Hoy la sociedad ha cambiado mucho, vemos más violencia y agresividad. Tenemos que reconocer que con la sola presencia de Carabineros ya no basta para disuadir a los delincuentes. Se ha denunciado delitos cometidos 30 ó 31 segundos después que pasara una patrulla por e lugar”, reconoce.
El mayor Muñoz sostuvo que hoy, más que nunca, se debe trabajar en conjunto como sociedad para, al menos, contraer este problema
