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Sigue el suspenso por la inhabilitación del alcalde de Chillán Viejo, Felipe Aylwin, mediante un mandato judicial.
Esto porque, por un lado el Tribunal Electoral Regional (TER) de Ñuble rechazó todas las apelaciones que los representantes jurídicos del jefe comunal realizaron para que este mismo órgano, que había resuelto suspenderlo de su cargo por estar como acusado en una causa penal, se declarara incompetente en esa materia.
Y por otro flanco, el fiscal Álvaro Serrano, titular de la causa de fraude al Fisco relacionado con la pérdida contable de más de $80 millones, y que incluye al alcalde en un episodio asociado a una supuesta contratación simulada de una funcionaria, apeló a la última resolución del Tribunal Oral en lo Penal (TOP) de Chillán, de negar la solicitud de inhabilitación en su contra.
Y en un escrito hecho público en la tarde del jueves se constataba que el mismo TOP declaraba admisible la solicitud.
De esta manera se supera una primera instancia a favor de la Fiscalía local, sin embargo, será este jueves 30 de mayo que en la Corte de Apelaciones de Chillán se deberá resolver si el recurso de apelación seguirá o no su curso en el Tribunal de Alzada.
Julio Díaz de Arcaya, abogado de Felipe Aylwin, abordó el tema desde la extrañeza.
“Es curiosa esta instancia, porque independiente que el Tribunal Oral haya declarado admisible este recurso, será definitivamente la Corte de Apelaciones quien determine si esto sigue o no, pero lo que sí está claro es que existe norma expresa respecto al artículo 364 de nuestro Código Procesal Penal en relación a que en este tipo de resoluciones, lo que dicte el Tribunal Oral es inapelable”.
Sin embargo, la opción más concreta en cuanto a una eventual suspensión es lo que se resuelva en el Tribunal Calificador de Elecciones (Tricel).
Como se explicó, el TER rechazó todas las solicitudes de los abogados de Aylwin para dejar sin efectos los decretos de suspensión, salvo el poder apelar al Tricel, por lo tanto, será este ente, en Santiago, el que tendrá la última palabra.
