Señor Director:
En nuestro país el abuso de posición dominante y el monopolio son el pan de cada día. En todos los sectores encontramos estas prácticas contra los compradores, a los que les fijan precios no equitativos, imponiendo precios exagerados o concediendo ventajas discriminatorias a los clientes, como es el caso de las rebajas para compras con tarjeta de crédito en desmedro de otros medios de pago, con el fin de controlar al comprador llevándolo a adquirir la tarjeta para obtener el beneficio.
En Chile, hay más de 9,5 millones de tarjetas de crédito que controla el retail con prácticas abusivas como las ventas atadas a seguros, firmas a ciegas de contratos, la famosa letra chica, cobros de intereses por sobre lo legal, lo que lleva ineludiblemente a la morosidad.
En la práctica, son los sectores medios y bajos de la población los que sufren estos abusos, debido al costo de la vida y los bajos sueldos y pensiones, quienes por necesidad y por la publicidad aumentan su endeudamiento, lo que ha llevado a la actual crisis social .
Chile es el país más caro para vivir, todos los productos de consumo, como frutas, carnes, semillas, arriendos, educación, salud, electricidad, agua y pasajes, entre otros, son el doble más caros que en cualquier país del mundo, mientras existe un pequeño número de familias que tienen el control del comercio, la industria, los medios de comunicación, donde la desigualdad se enseñorea y que tiene a nuestra patria al borde de la mayor crisis social y sin proyección de mejoría en el corto tiempo, además, los consumidores no cuentan con organismos de defensa real, ya que al Sernac le han quitado todas las atribuciones de apoyo al consumidor y solo se limita a recibir denuncias, que en su mayoría no tienen respuesta favorable.
Abril será un mes decisivo para ver si existe la luz al fondo de este túnel y podemos revertir entre todos esta situación.
Raúl Ferrada Varas
