Un nuevo traspié podrían sufrir las investigaciones de abuso sexual al interior de la Iglesia Católica en Chillán.
Ello, luego que el fiscal nacional, Jorge Abbott, decidiera retirar desde la Fiscalía Regional de O’Higgins las pesquisas para traspasarlas al persecutor Xavier Armendáriz, de la Metropolitana Centro Norte.
La medida, consignó BioBioChile, fue anunciada la tarde del jueves por la vocera del Ministerio Público, Marta Herrera.
Cabe recordar que la Fiscalía de O’Higgins se encuentra bajo serios cuestionamientos, y su jefe, el abogado Emiliano Arias, suspendido de su cargo por acusaciones de corrupción por parte de su subalterno, Sergio Moya.
En este contexto, y de acuerdo a fuentes del diario La Discusión, la decisión de Abbott afectaría a la denominada Causa Iglesia y sus aristas en la región de Ñuble.
Entre los casos se encuentra una acusación vigente contra el obispo emérito de Chillán, Carlos Pellegrin, además de los curas Héctor Bravo y Renato Toro por presunto abuso a un menor de edad.
Ante esta decisión del fiscal Jorge Abbott, la abogada Pilar Gutiérrez, miembro de la Comisión de Apoyo Integral a Víctimas de Abuso Eclesiástico en Ñuble, independiente del Obispado, cuestionó la decisión pero valoró el rol del persecutor Xavier Armendáriz.
Respecto a las investigaciones canónicas, y seguidas por la Fiscalía, Chillán encabeza el listado de diócesis con mayor cantidad de sacerdotes investigados, anotando cuatro que han recibido sanción canónica por abuso a menor y cinco mantienen investigación previa en curso.