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Una serie de eventuales irregularidades presentaron organizaciones vecinales rurales del sector poniente de Chillán, respecto de un proyecto de extracción de áridos que estaría depredando el medio ambiente y obteniendo cuotas de material muy superiores a lo establecido en el permiso original obtenido de parte de la autoridad ambiental.
Los cuestionamientos se dirigen hacia la empresa Arenex, que extrae desde hace varios años material pétreo desde el sector de Huechupín, la que según denunciaron vecinos al seremi del Medio Ambiente, Patricio Caamaño, ha modificado el curso del río en el sector, entre otras anomalías.
Ghislaine Vallejos, dirigente del sector, manifestó que lo que ocurre es una muestra palpable de lo que puede ocasionar aguas arriba el río Ñuble si se aprobara un proyecto de la misma empresa en El Huape, por parte del Servicio de Evaluación Ambiental (SEA).
Arenex, ligada a Cementos Biobío, pretende excavar una zona de 109 hectáreas aproximadamente en El Huape para retirar millones de metros cúbicos de áridos.
La dirigente indicó que “esto que vieron las autoridades en Huechupín no es ni el 0,1% del megaproyecto que está contemplado en El Huape, que son 109 hectáreas, o sea, y para graficar, 100 manzanas. Ese proyecto que está en revisión en el SEA va a ser más devastador que esto que hoy vieron en terreno personas de organizaciones del sector poniente, desde Villa Iraira hasta Confluencia.
Durante la visita de las autoridades el contador y funcionario de una empresa de áridos, Braulio Cires, explicó las anomalías que él advierte en el sector, donde en el pasado habían “50 cisnes y hoy no hay más que dos”.
El profesional agregó que “este rubro del retiro de áridos, atenta contra la naturaleza, no hay responsabilidad social empresarial y las empresas obtienen grandes beneficios a costa de la infraestructura de la misma comunidad, que después sustenta el Gobierno, que por ejemplo debe reparar caminos y enfrentar problemas como crecidas”.
Cires agregó que durante la visita pudieron atestiguar la existencia de malos manejos por parte de la firma en el lugar,la que según vecinos estaría extrayendo en su último año mucho más material del que estaba autorizada, en un sector del río Ñuble muy cerca de donde se une con el Chillán.
“Vimos que claramente hay una intervención sin conocimiento técnico, una depredación del cauce. Es una actividad totalmente influida por un mal manejo y un afán por obtener más recursos sobre lo establecido inicialmente”, precisó Cires.
El asesor de los vecinos agregó que “este proyecto se terminaría a fin de año y por lo tanto, lo que están sacando ahora son los descuentos. Al hacerlo tienen taludes no con la pendiente que debieran tener; tienen hoyos, cambios en el cauce del río; hay intervenciones con obras viales dentro del río lo que no debe ser; hay daño directo a la fauna del lugar. Algo grave es que cambiaron el pelo del agua o sea el flujo normal del río y aparentemente no presentan un proyecto de abandono”.
Ignacio Lagos, encargado regional de la Dirección de Organizaciones Sociales de la Seremi de Gobierno, en representación del seremi, Renán Cabezas, planteó que su objetivo es analizar los argumentos de todas las partes involucradas en el conflicto denunciado por los vecinos.
Lo que se pretende es que antes de fin de mes se genere una mesa de trabajo, donde participen vecinos, a empresa y entidades estatales como la DGA, la DOH, el SAG, Indap, además de la Seremi de Medio Ambiente, el SEA y la Superintendencia respectiva.
El seremi de Medio Ambiente, Patricio Caamaño, sostuvo que se acercaron al sector “porque existe una denuncia ciudadana y sí o sí tenemos que ver en terreno la condición real y que nos expresen sus dudas, inquietudes. Tenemos que ser súper responsables en canalizar de mejor manera estas dudas y poder corroborar que tanto desde los ámbitos técnicos y jurídicos las acciones de la empresa se ajusten al derecho y a la normativa vigente”.
El ingeniero ambiental agregó que “claramente hay observaciones que nosotros vimos en el minuto”, como carencia de algunas medidas de mitigación básicas cuando hay movimiento de faenas, como por ejemplo la inexistencias de cubiertas para evitar desprendimientos desde los camiones.
Caamaño confirmó que la reunión ampliada se realizaría el próximo 27 de mayo en Chillán.