Señor Director:
El desempleo femenino sigue siendo una herida abierta. El reciente informe Zoom de Género reveló una tasa de 10,1%, la más alta desde la pandemia, con más de 423 mil mujeres desocupadas y un alza en la informalidad. Preocupa, especialmente, que un tercio de las desempleadas tenga entre 25 y 34 años, y que incluso mujeres con estudios superiores enfrenten tasas mayores que los hombres.
Resulta incomprensible que, tras 30 meses de aumentos, no se hayan anticipado medidas frente a un escenario previsible: la reincorporación femenina al mercado laboral. Urge romper barreras estructurales, como el costo de la sala cuna, y focalizar programas de capacitación y empleo en mujeres jóvenes y madres. La educación técnico-profesional, por su flexibilidad y vínculo con la industria, puede ser una herramienta clave para revertir esta tendencia.
No podemos seguir mirando inmóviles cómo pasa el tren.
Loreto Ferrari
Rectora AIEP
