Señor Director:
Con pocos días de diferencia, emprendieron viaje hacia planos desconocidos, Rafael Cumsille y Roberto Fantuzzi.
Ambos cambiaron el paradigma de la actividad empresarial en Chile, echando por tierra los prejuicios que desde los tiempos de Marx han pesado sobre los dueños del capital. Muchas veces la sociedad olvida que el empresario es un ser humano, con dolores y triunfos. Y ellos, precisamente, humanizaron su profesión, a tal punto que serán ejemplos para los emprendedores del futuro.
“Don Rafa” y Roberto eran un espejo entre sí, en virtudes como la sencillez, la empatía, la solidaridad, la simpatía y la extraordinaria visión gremial que asumieron con una notable vocación de servicio al prójimo.
Rodrigo Landa Guíñez
