En la sesión del Concejo Municipal de Chillán, efectuada este martes, se expusieron algunos problemas en materia de seguridad que afectan a la comunidad.
Se trata de sectores de la ciudad que permanecen a oscuras por luminarias deficientes, como la Población Vicente Pérez Rosales y la Población Luis Cruz Martínez. El alcalde protocolar, el concejal Rodrigo Ramírez, señaló que la situación que es foco de incivilidades y facilita actos delictuales no debiera ocurrir pues hace poco más de un año se realizó el recambio del alumbrado público.
“Me preocupa que a pesar que hicimos el recambio de luminarias seguimos con sectores que quedan a oscuras. El otro día fui a una celebración del Día de la Madre al sector de la Vicente Pérez y estaba como boca de lobos, a las 7:30 de la tarde totalmente apagada. Cuando hablamos de prevenir y combatir la delincuencia tenemos que partir simplemente con tener luz y eso es algo relevante porque el proyecto de recambio de luminarias hablaba de que era otra capacidad energética y que iba a significar evitar estos cortes en estos sectores”, explicó.
El concejal indicó que en la Población Luis Cruz Martínez las luminarias estuvieron apagadas durante tres días. “Le volvió la luz a las 7:30 u 8:30 de la tarde. Esa población sigue teniendo problemas de años y no ha cambiado con respecto al recambio”, dijo.
Ramírez solicitó al municipio evaluar el motivo que provoca el corte de luz en el alumbrado público y buscar una solución para que los vecinos se sientan más seguros. “Debemos abordar la prevención sobre todo ahora en invierno que oscurece más temprano y genera incivilidades en la comunidad”, agregó.
Por su parte, el concejal Raúl Franulic, indicó que vecinos de Quinchamalí no han tenido respuesta ante la petición realizada meses atrás para cambiar las luminarias en mal estado.
“El pasado mes de abril los vecinos me reclamaron por la nula respuesta de las autoridades para cambiar las luminarias en mal estado en calles y el pasillo peatonal que une a dos sectores importantes de Quinchamalí”, expresó.
El edil explicó que la falta de iluminación aumenta la sensación de inseguridad y vecinos evitan transitar por el pasillo peatonal en horas de la noche. “Esto ocurre al lado y al frente del Cesfam de Quinchamalí”, añadió.
