El nuevo Hospital Regional de Ñuble presenta un 94% de avance en obras de infraestructura y un 42% en el proceso de adquisición y adjudicación de equipamiento clínico y médico especializado.
Según lo estipulado en el contrato, las obras debieran concluir en agosto de este año, para posteriormente dar inicio al periodo de observaciones, revisión de detalles técnicos y gestión de la autorización sanitaria, requisito indispensable para comenzar el traslado y la apertura del recinto. Esta etapa se proyecta para el 2026.
“Junto al importante avance en obras, nos encontramos en una fase clave de la puesta en marcha: la ‘habilitación’, que considera la licitación, adjudicación e incorporación de equipamiento clínico, mobiliario y tecnologías. Esta etapa es comúnmente conocida como ‘vestir el edificio’”, explicó la Dra. Luz María Morán, directora del Hospital Clínico Herminda Martín.
Mientras que, Elizabeth Abarca, directora del Servicio de Salud Ñuble, añadió que “el nuevo Hospital Regional de Ñuble avanza sostenidamente hacia su objetivo de convertirse en un centro de alta complejidad al servicio de la comunidad, con infraestructura, equipamiento y equipos humanos preparados para responder a los desafíos de la salud pública regional”.
En cuanto a las obras de acceso al nuevo recinto hospitalario, estas ya están finalizadas. Se trata de una entrada por la avenida O’Higgins y otra por calle Rosauro Acuña, que será el acceso principal a la Unidad de Emergencia.
Solo resta el traslado de cuatro postes de alumbrado eléctrico, ubicados en el bandejón central de la avenida O’Higgins, lo que permitirá concretar la recepción final de estas intervenciones. Este es un trabajo clave para mejorar el flujo vehicular y accesibilidad al nuevo recinto asistencial, beneficiando directamente a pacientes, funcionarios y visitantes.
Las obras son parte del Estudio de Impacto sobre el Sistema de Transporte Urbano (EISTU) y contemplaron nuevas pistas de acceso, instalación de semáforos, paraderos y bahías para la locomoción colectiva, señalética vial y mejoras en la seguridad del entorno, que permitirán una circulación más fluida en el sector, ordenando el tránsito vehicular y asegurando un acceso expedito al hospital. Según estimaciones de la Secretaría de Transportes y Telecomunicaciones (Sectra), cerca de 800 vehículos por hora ocuparán la avenida O’Higgins en horas punta, tanto en la mañana como en la tarde.
Las medidas de mitigación son ejecutadas por la constructora Finso, empresa a cargo de las obras del Hospital Regional de Ñuble.
Estacionamientos
La congestión y desorden que generan los vehículos mal estacionados alrededor del Hospital de Chillán son situaciones que se busca evitar en el nuevo Hospital Regional. La mega obra tiene 20 mil metros cuadrados de estacionamientos, que estarán ubicados en los niveles subterráneos -1 y -2 del edificio, al que podrán acceder funcionarios y usuarios.
“El nuevo hospital contará con estacionamientos destinados a usuarios que acudan a realizarse procedimientos ambulatorios, personas embarazadas -como aquellas que inician su proceso de hospitalización para el parto-, personas con movilidad reducida, y también considera espacios para el retiro de pacientes tras recibir el alta médica”, detalló Sebastián Olea, Inspector Técnico de Obras del nuevo hospital.
“Además, se contempla infraestructura para bicicletas, motos y scooters, promoviendo así el uso de medios de transporte sostenibles y contribuyendo a descongestionar el entorno”, agregó.
Desde la Municipalidad de Chillán también trabajan para en lo posible reducir impactos en la vialidad. La Dirección de Tránsito analiza y propone cambiar el sentido del tránsito en las calles que se estimen necesarias, para ordenar con anterioridad los circuitos alrededor del nuevo hospital. Tal como ocurrió en calle Juan José Gazmuri, que a contar de este año hicieron el cambio de tránsito, y pasó de ser una vía con dos sentidos de tránsito a uno solo.
“Actualmente se encuentra en evaluación en Rosauro Acuña, por donde se encuentra el acceso a Urgencia, pero se va a poder definir una vez que esté la programación de traslado del hospital un poco más avanzada. Esa calle es la que se está evaluando junto a su continuidad hacia el costado norte de la avenida O’Higgins, que se llama calle Uno”, indicaron.
Mencionaron que las medidas de mitigación ejecutadas por el nuevo hospital mejoraron los circuitos peatonales del entorno para facilitar la llegada al usuario. Se dispuso también de un control semaforizado en la intersección de calle Rosauro Acuña con Palermo, que ya está en funcionamiento.
Para este año, la Dirección de Tránsito estima realizar mantenciones a la demarcación de pasos peatonales, en esquinas y cruces en el sector.
Por otra parte, aclararon que no se considera la apertura de nuevas calles en las inmediaciones del nuevo Hospital Regional de Ñuble.
Recorridos de transporte público
Con la puesta en marcha del nuevo centro asistencial habrá un cambio importante en el patrón de flujo vehicular en la ciudad y en la manera en que las personas se mueven alrededor de ella, por lo tanto, el transporte público local deberá adaptarse ajustando sus servicios, frecuencias y recorridos a las necesidades de los usuarios, según explicó el Seremi de Transportes, Javier Isla Figueroa.
“Junto con la apertura del nuevo Hospital Regional de Ñuble conllevará un cambio en la dinámica de viajes de los habitantes de la intercomuna, es por esto que el transporte urbano mayor y menor deberá adaptarse a esta nueva realidad, como Seremía se ha barajado la optimización de servicios, trazados y frecuencias para cubrir esta nueva necesidad y este polo de atracción de viajes, además, estamos barajando algunas modificaciones que están en evaluación, de las cuales esperamos tener novedades en el segundo semestre de 2025”, dijo.
En tanto, desde la Asociación de Dueños de Taxibuses Urbanos de Chillán advirtieron que no es necesario que todas líneas de buses modifiquen sus trazados para incluir un recorrido por el nuevo hospital, porque consideran sería un servicio ineficiente.
En la actualidad, microbuses de las líneas 1, 3, 6 y 13 pasan por el nuevo hospital. Humberto Llanos, presidente de la Asociación, aseguró que la modificación de los trazados se efectúa acorde a la oferta y demanda.
“Pongo un ejemplo: Toda la gente que viene del sector Río Viejo, Los Puelches, esas personas quieren venir a trabajar y llegar luego al centro. ¿Se imagina que el bus viniera de allá, tomara la avenida Collín para pasar fuera del hospital y después fuera al centro? A la gente no le va a gustar. Entonces, es poco eficiente eso”, explicó el dirigente.
Reiteró que la propuesta del gremio de transporte público mayor, para cuando entre en funcionamiento el nuevo centro de salud, es implementar la integración tarifaria que permita a los usuarios cambiar de una ruta a otra sin tener que pagar un pasaje adicional. Para esto se requiere modificar el actual contrato de Perímetro de Exclusión que regula el transporte público en la intercomuna y que tiene vigencia hasta el año 2027.
“Nuestra solución, que hemos visto en conjunto con la Seremi, es, como hoy día Chillán es la única ciudad fuera de Santiago que cuenta con recaudo electrónico implementado de manera exitosa, hoy día la tecnología permitiría que la gente tome un bus, se baje unos minutos, haga un transbordo y el segundo pasaje no pagarlo. Pero para eso se necesita modificar el contrato que tenemos, la regulación con el Ministerio, porque ese segundo pasaje, que para el usuario no tendría costo, el Ministerio tendría que compensar a los operadores de transporte, y eso entiendo que está en Contraloría, esperemos que salga eso”, dijo.
Por otra parte, el dirigente señaló que “es importante que el nuevo centro de salud mantenga despejado sus alrededores, y que no prolifere el comercio ambulante y autos mal estacionados, como ocurre hoy día en centros asistenciales de la ciudad”.
“Si miramos un poco los establecimientos de salud que hoy día tenemos, por ejemplo, hay uno en Los Volcanes, en Reloncaví con Los Cóndores, o en la calle Francisco Ramírez, la problemática que hay son calles estrechas, colapsadas por autos estacionados donde no está permitido, que incluso muchas veces ni la ambulancia puede parar, calles que hoy día poseen ambulantes. Entonces esperamos que en el nuevo hospital no se repitan esos errores”, dijo.
Agregó que “el nuevo hospital está en una avenida transitada, donde los autos logran altas velocidades, por lo tanto, esperamos que haya infraestructura vial para el transporte público, llámese rejas para impedir que los peatones crucen en lugar indebido, bahías para que los buses puedan acercar en un paradero establecido”.
El dirigente del gremio de transporte público recordó que está la promesa por parte de la autoridad de instalar en el primer semestre de este año 10 paraderos inteligentes, que cuentan con pantalla digital e indican en tiempo real la llegada del bus.
