Señor Director:
Cuando decimos que estamos envejeciendo, escondemos una realidad que nos preocupa y que preferimos ignorar. Lo indicadores están a la vista. Superiores al promedio nacional (14%), incluso 9 comunas están por sobre el promedio regional (16,7). Prácticamente en cada familia de nuestra región hay una persona mayor; Cobquecura, 23; 5%, Ránquil 22,8%;Ñiquén 21,7%,;Portezuelo 21,6%; Ninhue 21,3%; Quillón 21, 1% etc.
Los efectos están solo en pacientes crónicos, en listas de espera, en las salas de urgencia. Y sobre todo cuando ignoramos una perspectiva de envejecimiento acelerado y la marginación de las personas mayores, con una mirada de descarte Desechables, tanto para el mundo laboral, como para el mundo de las oportunidades y sobre todo de la dignidad. El viejismo, es una realidad, pero invisible. Tenemos muchos mayores a los que no vemos en su total dimensión y los tratamos con atributos demostrativos basados en el prejuicio frente a quienes son los pilares donde descansa lo que somos.
Somos un a región envejecida y debemos innovar para enfrentar oportunamente esta realidad, sumándonos al “Manifiesto de Salamanca” en contra de toda forma de discriminación por edad o más aún implementar la Universidad de la experiencia que lleva 35 años de éxito en España, cuya aplicación se concretó exitosamente en 2019 en la comuna de Quillón por el fallecido Dr. Alberto Gyhra y los departamentos de educación y salud.
Dr. Patricio Torres Castillo
