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Esta semana el Ministerio de Obras Públicas, a través de su Dirección de Vialidad, dio inicio a la segunda etapa del plan de mejoramiento de la ruta N-48-O tramo que une las comunas de Bulnes y Quillón, camino que se encontraba con graves deterioros en su calzada y donde se llevó a cabo el término anticipado del contrato con la empresa que estaba a cargo de las obras de reposición total del tramo II, las que finalmente no se concretaron.
Por tal razón, el MOP comprometió una intervención a través de su equipo de Administración Directa de Vialidad, que tuvo su primera etapa entre agosto y octubre de este año, con el bacheo en frío, bacheo mecanizado en caliente y aplicación de sello de grietas, y ahora, se inicia la segunda etapa, de recapado que mejorará la seguridad y mantendrá la conectividad vial de esta transitada arteria.
“Estamos dando cumplimiento al mejoramiento de la ruta de Bulnes-Quillón, que estaba con complicaciones de contrato producto de la pandemia y porque tuvimos que hacer un término anticipado con la empresa anterior. Como Ministerio de Obras Públicas nos comprometimos a hacer un tratamiento superficial que nos permitiera poder mejorar esta ruta durante el tiempo en que demora la próxima licitación, de manera que hoy día damos inicios justamente a estos trabajos, porque ya estamos en condiciones de poder dar respuesta y poder comenzar lo que hoy día necesita esta comunidad para poder transitar en forma segura y en forma como corresponde con su vía expedita”, informó el seremi (s) de Obras Públicas de Ñuble, Roberto Missene.
Avances
Actualmente, las obras incluyen bacheos previos y la aplicación de una capa asfáltica de seis centímetros sobre una manta geocompuesta. Esto busca evitar la propagación de grietas y mejorar la resistencia del pavimento. Según Oliver Morales, director regional de Vialidad, el objetivo es “garantizar la seguridad vial mientras se prepara una nueva licitación para la conservación definitiva proyectada para 2025”.
“Estamos utilizando una geogrilla, que es la que va a aplicar una mayor capacidad de soporte, para no transmitir, las grietas o fisuras que están bajo el pavimento original, a nuestro nuevo asfalto Estamos también verificando y teniendo el cuidado debido al alto tráfico vehicular, porque no queremos exponer a nuestros funcionarios a algún riesgo”, agregó Morales, indicando que los trabajos se han dividido en tramos de 200 metros para minimizar el impacto en el alto tráfico, y se concentran actualmente entre los kilómetros 11,215 y 15,380. Se espera finalizar esta fase en las próximas semanas, dependiendo de las condiciones climáticas y logísticas.
Perspectivas futuras
La intervención actual es una solución parcial mientras se proyecta una licitación mayor en 2025, para ello, actualmente siguen las obras de cambio de postación por parte de las empresas eléctricas, y el cambio de cercos para dejar la faja necesaria para la obra, disponible.
“Si bien dimos término adelantando al contrato con la empres que debía realizar estas obras, proceso en el que aún estamos en temas administrativos, hoy se mantienen los trabajos de los cambios de postación, que es parte de los trabajos que se van a mantener junto también con el movimiento de los cercos que también es prioritario, y hoy en día con la administración directa solamente vamos a abarcar lo que es la calzada para poder evitar tener nuevamente problemas de baches en la ruta, mientras preparamos la nueva licitación que proyectamos licitar el 2025”, cerró el director regional de Vialidad Ñuble.