En julio de este año, el Concejo Municipal de Chillán conoció los detalles de la nueva ordenanza que regula el comercio ambulante, conforme al mandato expreso de la ley 21.426 (2021), que obliga a los municipios del país a contar con esta herramienta legal sobre permisos, restricciones, fiscalizaciones y sanciones.
Una vez aprobada por el cuerpo edilicio, desde la Municipalidad de Chillán se anunció que esta entraría en vigencia este viernes 1 de noviembre, fecha para la que la Inspección Municipal ya tenía contemplado una plan estratégico centrado en el casco comercial histórico de la comuna.
Sin embargo, desde el canal de comunicaciones del gobierno comunal confirmaron a La Discusión que la fecha de entrada en vigencia se había pospuesto.
La razón se fundamenta en ciertas rectificaciones realizadas a algunos puntos de la carta normativa.
“No lo sabía, la verdad me toma por sorpresa esta información”, dice el concejal Patricio Huepe, quien si bien admite que para él y algunos de sus colegas había algunas dudas respecto al radio de acción de fiscalizaciones propuesto en la ordenanza, aclara que “en lo formal no se nos ha dicho nada y tampoco es un tema que se haya tratado en alguna comisión”.
De esta forma, desde el consistorio agregan que por el momento, y mientras no se discutan las modificaciones con el concejo, no existe siquiera una fecha tentativa para el arranque del nuevo reglamento.
A juicio del concejal Joseph Careaga, quien tampoco conocía respecto del retraso, “creo que esas rectificaciones ni siquiera van a ser discutidas por este equipo de concejales, y los van a tratar con el nuevo concejo, y eso significaría que de ninguna manera se trate de algo que se vaya a solucionar en los pocos meses que quedan del año”.
Expectativas moderadas
El documento especifica, además, los lugares en que se permitirá la actividad. Estos son, para las calles El Roble, entre Arauco y 5 de Abril e Isabel Riquelme; Maipón, entre Arauco y Sargento Aldea (a excepción de las cuadras con paraderos de micro); Arturo Prat, entre 5 de Abril e Isabel Riquelme.
Para las calles orientadas de norte a sur, se autorizaron 5 de Abril, entre el Roble y Arturo Prat, (exceptuándose donde se encuentra paradero de colectivo); Isabel Riquelme, entre El Roble y Arturo Prat; y Sargento Aldea, entre Maipón y Arturo Prat.
A lo anterior se agregan el Pasaje Santa Teresa y el Paseo la Merced (al interior).
Respecto a las posibilidades concretas que esta ordenanza genere un impacto real en el comercio ambulante, la concejal Quenne Aitken advierte que “esto va muy de la mano del trabajo que pueda realizar la Delegación Presidencial en conjunto con la municipalidad”.
En específico apela a fiscalizaciones exhaustivas y “que las nuevas cámaras del mercado nos ayuden a obtener evidencias y finalmente, se pueda ejercer junto a la fiscalía una mejor labor, para que las aprensiones que se realicen sean con procesos y así estas personas que finalmente le es mucho mas fácil no tener permisos, puedan terminar con el ocupamiento de las calles, Si no hay trabajo mancomunado y mano dura, no hay resultados”.
Menos optimista asoma el presidente de la Cámara de Comercio, Alejandro Lama, quien destaca que “nosotros nunca hemos sido partidarios de que se cree una ordenanza, porque eso para perpetuar este tipo de actividades en la calle”.
De todas formas, y aunque admite que será bueno el que estas casi 80 personas deban contar con distintivos de autorización para poder ser identificados, añade que “nuestras expectativas son bajas en materia de resultados, porque hemos sido testigos de los fracasos en los que han terminado tantos otros intentos por controlar, delimitar la actividad y fiscalizarlos más, y siempre termina todo en desorden”.
Por último, postula que “al fin y al cabo, todo depende de la coordinación con la policías, la respuesta en tribunales y la voluntad del alcalde de hacer cumplir la ordenanza”.