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Durante los primeros días de octubre, un grupo de parlamentarios de la Región, junto al delegado presidencial de Ñuble, Rodrigo García, visitaron,en Santiago, al ministro de Justicia, Luis Cordero, para -entre otras materias- hacer una revisión del futuro carcelario en la zona, luego que desde el Ministerio del Interior se confirmara que no existen proyectos ni recursos para prometer una futura cárcel regional.
Y la respuesta que recibieron fue tan tajante y tan negativa como lo reconocido por la ministra Carolina Tohá, en su último paso por Chillán, el pasado 20 de agosto: No hay nada.
Sin dar mayores indicios de algún plan en concreto, el delegado presidencial dijo a LA DISCUSIÓN que “se están trabajando algunas ideas y se están viendo las posibilidades existentes, nada más”.
Sin embargo, el malestar se ha hecho más patente en otros personeros, como las diputadas Marta Bravo y Sara Concha, quienes al igual que el consejero regional y excoronel de Carabineros Ñuble, John Polanco, no han ocultado su decepción y realizaron una convoctaroria a la ministra Tohá, para que se actualice de las condiciones actuales de la cárcel de Chillán, que se ha visto más exigida que nunca antes en toda su historia.
Según cifras de la Asociación Nacional de Funcionarios Penitenciarios (Anfup) Ñuble, el centro de reclusión chillanejo, diseñado para no más de 314 internos, ya supera las 810 plazas y con una tasa mensual de crecimiento de un 10%, por lo que el suboficial Cristian Montecinos, presidente del gremio en la Región, anticipaba una ocupación de más de mil reclusos para fines de este 2024.
De ser así, el recinto tendría sobre mil reos (casi un 200% de ocupación), por lo que ni siquiera el anuncio hecho por el Gobierno, de sacar a 200 personas y reubicarlas en la nueva cárcel La Laguna (El Maule), terminaría con el hacinamiento ni los problemas de violencia vaticinados por la Anfup.
Dentro de lo que denomina un “Plan Ñuble”, la diputada Sara Concha se refirió al conflicto carcelario.
“El colapso que tenemos, sin duda, es un peligro inminente para la población y necesitamos crear otra cárcel en la región, que permita descongestionar ésta y que genere un espacio donde las personas puedan pagar sus condenas”.
Asimismo, la diputada Marta Bravo, hizo eco del llamado de atención de la Anfup y confirmó que “hay una real preocupación por la sobrepoblación, donde un porcentaje corresponde a población migrante. Todos sabemos la problemática de seguridad que estamos viviendo, cómo ha crecido la delincuencia y la violencia en la delincuencia. Es por eso que fuimos donde el ministro para preguntarle qué planes tiene, no solo para la región, sino para el país”.
Condiciones deficitarias
Por su parte, el consejero John Polanco, dijo la semana pasada, durante la sesión del viernes del Consejo Regional, que no sólo la “bomba de tiempo” que supone una cárcel con mil reos cada vez más peligrosos, debe ser un tema de preocupación.
Siendo prefecto de Ñuble, “me tocó revisar el interior de la cárcel, me tocó inspeccionar, y la falta de salubridad, de higiene, de dignidad es evidente. Si vieran cómo comen los gendarmes, en una cocinilla, al lado de una celda, verían el tipo de dignidad que una cárcel como ésta le brinda a nuestros gendarmes”.
Polanco pidió no naturalizar el que Chillán, ni ninguna otra comuna de la Región, tenga su cárcel en el centro de la ciudad.
“Si no se hace nada, no se va a tratar nunca este tema. No estoy pidiendo que la solución salga de este Consejo, porque una decisión como la construcción de una cárcel, no nos corresponde, pero sí creo necesario levantar este tema como tarea regional”, añadió.
El coronel (r), lamentó también que “la ministra Tohá no haya vuelto a hablar del tema ni tampoco vuelto a la zona, considerando el llamado urgente que está haciendo casi de manera desesperada este grupo de gendarmes, de manera pública. Tampoco veo un proyecto por parte de la seremi de Justicia para proponerlo al nivel central”, criticó