Señor Director:
He tenido el agrado de recibir en mi casa a Miguel Gaete de la Fuente, presidente de Federación Nacional de Asistentes de la Educación Pública de Chile. (Fenadep), quien me trae un regalo que recibo con sincera emoción: La colección completa de 22 libros sobre Poemas Escolares que ese gremio ha publicado año a año con un total de 1302 poemas escritos por escolares de las 21 provincias de Ñuble y en los primeros tomos también de las otras provincias que integraban la región del Bío Bío.
He recorrido varios tomos de esta colección y estoy sorprendido de la calidad poética de estos niños que juegan con las palabras como aprendices de escritores, motivados por temas recurrentes: naturaleza, pueblo en que viven, primavera, flores, madre, escuela, amistad. Como lo dijimos en “cartas mensajeras anterior”, es posible que ninguno de estos pequeños escritores se convierta en grande en las letras, pero con seguridad todos crecerán con una mayor sensibilidad, gusto por la belleza y la escritura, en suma, serán mejores personas y ese es el objetivo final que se proponen los creadores de este magnífico proyecto.
Incorporo los 22 volúmenes a mi biblioteca personal, la que tiene señalado un destino: será donada a la Sociedad de Ñuble en cuanto esté más claro el panorama de la futura Biblioteca Regional o bien vaya a un alero municipal. Son cinco mil volúmenes de cultura chilena que esperamos constituyan un aporte para el fortalecimiento cultural de nuestra región.
Cuando nos abruman signos de decadencia nacional, recibir esta colección de poemas infantiles y juveniles, es como recibir un rayo de esperanza. Es cierto que estamos agobiados de malas noticas, pero obras como la que le estoy relatando, recuerdan aquel grito libertario que animó a los patriotas después del desastre de Cancha Rayada: “aún tenemos patria ciudadanos”.
Alejandro Witker
Historiador
