Señor Director:
Pareciera existir algo de confusión al relacionar las frases “Chillán Viejo cuna del Libertador” y “Chillán ciudad histórica” y además agregar el concepto de “Padre de la Patria”. Ello llevaría a algunos a querer lanzar un llamativo enunciado: “Chillán, donde nace la Patria” o “Chillán Viejo, cuna de la Patria”.
Es un error vincular a Chillán o Chillán Viejo con el nacimiento de la Patria. El surgimiento de la Patria y su significación una vez finalizada la colonia, tiene directa relación con el proceso emancipador y la ruptura con la monarquía española, desarrollado en Chile entre 1810 y 1818.
Si bien durante este período ocurrieron en Ñuble hechos en pro de la Independencia, como el Sitio de Chillán y la Batalla de El Roble; asimismo hubo participación de algunos(as) patriotas locales a lo largo de esos años, como el mismo Bernardo O” Higgins, su madre Isabel Riquelme, Fray Rosauro Acuña o Cornelia Olivares. Lo cierto es que, el origen de la Patria ligado a la consolidación de la Independencia de Chile, tuvo un primer evento con el Cabildo Abierto del 18 de septiembre de 1810 y la conformación de la Primera Junta de Gobierno.
Pero la Patria y su independencia no se afianzaron, sino hasta la ocurrencia de 3 hitos fundamentales ocurridos durante el verano de 1818: la firma del Acta de Independencia en Concepción, su ratificación en Talca y la Proclamación y Juramento en Santiago.
No obstante que, la tranquilidad para asegurar la emancipación se alcanzó con el triunfo patriota en Maipú en abril del mismo año, lo cual extinguió casi por completo las defensas realistas.
Lo riguroso, entonces, es que ni Chillán ni Chillán Viejo, como tampoco Ñuble, tienen que ver con el nacimiento de la Patria y la consagración definitiva de la independencia.
Marcelo Moraga A.
