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Un grave problema existente en Chile y que data de hace tiempo es la notoria insuficiencia de las construcciones carcelarias, desbordadas por un exceso de presos. Esa realidad es compartida por Chillán, cuyo recinto carcelario además se encuentra emplazado en pleno centro de la ciudad y data de mediados del siglo XX.
La masiva fuga, el incendio de cuatro viviendas aledañas y la muerte de tres reclusos en plena calle, en un enfrentamiento con personal militar, el 27 de febrero de 2010, no fueron argumento suficiente para su traslado. Tampoco otros episodios posteriores de violencia e intentos de fuga que revelan los alcances del problema.
Entretanto, las autoridades de sucesivas administraciones solo atinaron a formular promesas y proyectos inconclusos. De hecho, en un inventario de las grandes deudas de los cuatro últimos gobiernos, la nueva cárcel de Ñuble debería estar en los primeros lugares.
Hoy en su visita a la Región, la Ministra del Interior y Seguridad Pública, Carolina Tohá Morales, se hizo cargo del tema durante una entrevista con Radio La Discusión, y habló con franqueza sobre la construcción de una nueva cárcel regional, descartando que exista un proyecto en el corto plazo para ello.
“No me voy a sumar a la procesión de promesas incumplidas en esta materia. Quiero ser muy clara y transparente, hoy no existe un proyecto para una nueva cárcel de Chillán”, reconoció la secretaria de Estado.
Sin embargo, Tohá precisó que el Gobierno tiene una robusta agenda en el tema carcelario a nivel nacional que puede dar respuesta a los problemas de hacinamiento que sufre actualmente el recinto penitenciario local.
“Se están desarrollando proyectos por un total de 12 mil plazas carcelarias, con diferentes grados de avance: algunos van a quedar terminados en este gobierno y otros avanzarán o se iniciarán en esta administración. Son cárceles que prestan servicio a nivel nacional, de modo que las personas que cometen delitos de cierto nivel de gravedad hacia arriba, y que no son de la región, se les puede ubicar en un penal más adecuado, siempre cautelando no causar problemas de hacinamiento, como los que sufre precisamente la cárcel de Chillán.”
En esta línea, la Ministra del Interior confirmó que “en la cárcel que vamos a inaugurar en los próximos meses, que es un proyecto gigantesco que se demoró 15 años en materializarse, el penal La Laguna, en Talca, que tendrá 2.300 plazas nuevas, está considerado reservar una cantidad significativa de cupos para la región de Ñuble, porque aquí tienen un recinto que está con un nivel de hacinamiento de casi 2 por 1, o sea con el doble de internos para su capacidad.”
Carolina Tohá enfatizó que esa será la respuesta en el corto plazo, y aclaró que han buscado alternativas de terrenos para construir un nuevo penal, pero han chocado con la resistencia de comunidades y autoridades comunales. “De modo que hoy no puedo afirmar que hay un proyecto y un emplazamiento para una nueva cárcel, pero sí puedo asegurar que las condiciones de hacinamiento que se han vivido en la cárcel de Chillán van a tener una solución muy rápida con la puesta en marcha del penal La Laguna”, concluyó.