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Un fuerte impacto en los costos de las pymes, como consecuencia de las alzas de las tarifas eléctricas anunciadas por el gobierno, advirtieron los gremios productivos de Ñuble. Según estimaron los dirigentes, la energía representa actualmente entre el 15% y el 30% de los costos de las empresas, dependiendo del tipo de actividad y el horario de funcionamiento, por lo que plantearon la necesidad de apoyar a las pequeñas y medianas, de manera de evitar que se profundice la destrucción de empleos que se observa en la región.
Luego del congelamiento de las tarifas eléctricas durante los últimos cinco años, a partir del 1 de julio próximo comenzarán a regir alzas en las cuentas de la luz en un proceso gradual que se extenderá hasta el segundo semestre de 2026.
Según las estimaciones del Ministerio de Energía, teniendo en cuenta la entrada en vigencia de la Ley 21.667 de Estabilización de Tarifas Eléctricas, los incrementos para los clientes regulados en la región de Ñuble variarán entre 7% y 21% en julio de 2024, dependiendo del consumo de los hogares. En tanto, en octubre se registrarán alzas en las cuentas finales que irán desde 26% a 33%, en comparación con las tarifas actuales. Para enero de 2025, las tarifas en Ñuble acumularán un alza de hasta 41% en comparación con las tarifas actuales. Sin embargo, a partir de julio de 2025 las alzas comenzarán a atenuarse.
Pero se trata de estimaciones, dado que aún falta considerar otras variables, como el tipo de cambio y todavía resta conocer los respectivos decretos tarifarios; además, se trata de cifras promedio, ya que en algunas comunas y en clientes rurales las variaciones podrían ser mayores.
Alza de hasta 71% en Yungay
Un informe de la consultora Energie, reveló que se espera, en términos promedio nacionales, un aumento de alrededor de un 62% en las cuentas de clientes regulados (residenciales), dependiendo de su nivel de consumo. Adicionalmente, con la entrada en vigencia de los nuevos decretos se materializarán incrementos significativos en las tarifas de clientes comerciales, agrícolas e industriales pequeños o medianos, en zonas rurales del país, de hasta un 90% en la cuenta final dependiendo de su comuna y opción tarifaria.
A modo de ejemplo, un cliente residencial, que consume en promedio 400 kWh/mes y paga $55.185, pasará a pagar $77.380 por el mismo consumo en julio, y más de $83.000 en octubre de este año. Por otro lado, un cliente tipo industrial o comercial en zona rural que consume actualmente 4.800 kWh/mes y paga $1.000.000, pasará a pagar hasta $1.900.000 por el mismo consumo en octubre de este año, dependiendo de la comuna en que se encuentre.
Para la región de Ñuble, el informe cita el ejemplo de la comuna de Chillán, donde las alzas para los clientes comerciales e industriales BT4.3 será de hasta 53%; mientras que para los AT4.3 llegarán hasta 39%. Asimismo, destaca el caso de la comuna de Yungay, donde los clientes comerciales e industriales rurales sufrirán alzas de hasta 71% (BT4.3) y 54% (AT4.3).
Instrumentos de apoyo
Alejandro Lama, presidente de la Cámara de Comercio, Industria, Turismo y Servicios de Chillán, expresó su preocupación por los incrementos en las tarifas, “que van a afectar mucho a las Pymes, dependiendo de la actividad que realicen, porque hay algunas tiendas que cierran a las 18.00, pero también hay aserraderos, fábricas, hoteles y restaurantes que usan mucha electricidad y, por lo tanto, les impactará mucho más”.
“Convengamos que no es el momento adecuado; si bien entendemos que hubo un congelamiento de tarifas, pero ahora estamos en un escenario en que las ventas están malas y hay una tasa de desempleo muy alta en la región, que alcanzó los dos dígitos; hay muchas dificultades para enfrentar estas alzas”, expresó el dirigente gremial, quien subrayó que, “hubiese sido mejor ajustar los precios a partir de la primavera, porque en invierno las tarifas ya son más altas después de las 18.00 horas”.
Además, planteó que el reajuste “debió ser más escalonado, porque el gobierno habla de gradualidad, pero lo que vemos es que en julio y octubre tendremos un salto importante en las tarifas”.
Según adelantó Lama, “las alzas en los costos de operación tendrán que trasladarse a precios, para poder solventar este mayor gasto; el problema es que eso va a significar una menor demanda, es decir, bajas en las ventas, y si eso ocurre también se pone en riesgo el empleo”.
Por otro lado, afirmó que, “quizás una solución interesante sería que el Ministerio de Energía dé facilidades para que las pymes puedan, de alguna manera, llegar a autoabastecerse de energía mediante paneles solares, a través de subsidios, como se ha hecho con el programa Ponle Energía a Tu Pyme, que ha sido una positiva iniciativa en la que estuvimos participando en el gobierno anterior y que dio buenos resultados”.
El timonel del comercio recordó que las Pymes, además del problema de las bajas ventas, “vienen con una mochila de deudas que arrastran desde la pandemia, están todas pagando sus cuotas, por lo que sería importante saber si el Ministerio de Economía está evaluando alguna medida que permita mitigar el problema de liquidez que se nos viene, por ejemplo, algún crédito blando”.
Rubro vulnerable
El rubro gastronómico y de la entretención es uno de los rubros más vulnerables frente a las alzas, debido a la alta dependencia de la electricidad. July Llevul, presidente de Gayen, la asociación gremial que reúne a las empresas del rubro en Chillán, expresó que “es una difícil situación; somos Pymes, no grandes empresas, y el alza de 40%, aproximadamente, nos afectará muchísimo. Piense que nosotros pagamos cuentas de 1 millón 200 mil a 1 millón 600 mil pesos, en mi caso, por ejemplo, la electricidad representa cerca del 15% de mis costos, todo se basa en la electricidad, desde las máquinas, los refrigeradores, la iluminación, la climatización hasta la fabricación del hielo, entonces, se va a notar mucho el impacto y de todas formas tendrá que traspasarse al precio final para los clientes, lo que se traducirá en bajas en las ventas”.
Además, la dirigente criticó “la falta de información al respecto. Todavía no sabemos a ciencia cierta de cuánto será el alza para cada uno, que, en realidad, es el pago de una deuda, entonces, creo que debería haber mayor transparencia por parte de los organismos respectivos, saber cuánto debe cada uno y por cuánto tiempo deberemos pagar esa deuda; también me puedo preguntar qué pasa si estoy recién emprendiendo ¿también me debo hacer responsable por esa deuda?”
July Llevul anticipó que “tendremos alzas en los insumos también, eso es indudable, por ejemplo, van a subir los congelados, porque la electricidad está presente en todo; esto va a presionar la inflación y va a aumentar el desempleo. Ya somos la región más pobre, somos la región con más desempleo del país, las condiciones económicas están demasiado difíciles, estamos sobreviviendo a una crisis económica y esto, sin duda, nos viene a golpear más aún. Esperamos que nuestras autoridades visualicen esta situación, que no es solo de nuestro rubro, sino que de muchas pymes de nuestra región”.
La empresaria precisó que el rubro está operando con el mínimo de trabajadores, por lo que, de cara a la temporada primavera-verano, cuando crecen las ventas, lo más probable es que esa necesidad sea cubierta con personal part time.
Destrucción de empleos
“La energía, en este momento, es una de las principales preocupaciones del gremio. Va a impactar fuertemente en el sector agrícola. De acuerdo a estimaciones de Copelec, se habla de entre el 50% y el 60% de aumento en el costo de la energía para las empresas agrícolas, lo que es tremendo”, manifestó Carlos González, presidente de la Asociación de Agricultores de Ñuble.
El dirigente subrayó que la electricidad representa entre el 25% y el 30% de los costos de las empresas agrícolas. Puntualizó que “hay muchos campos que están con riego tecnificado y tienen que usar bombas para el riego, el fertirriego; están los que tienen pozos profundos, los que tienen pivotes y para qué hablar de las cámaras de frío. Van a estar muy complicados los agricultores, y si a eso le sumamos los años en que han sido golpeados, los grandes incendios, las inclemencias climáticas del año pasado y de este año, que, además, ha sido pésimo en términos comerciales para los cultivos tradicionales, en que toda la gente perdió plata, porque nadie ganó plata con el raps, con el trigo, ni con la avena. Yo veo en el horizonte un nubarrón muy grande”.
En materia de empleo, reconoció que el mercado laboral agrícola viene mostrando una reducción fuerte. “Eso se ve en los campos, uno habla con los colegas y todos están despidiendo gente, se están quedando con lo justo y necesario; un agricultor que tenía ocho trabajadores, despidió a seis y se quedó con dos, le pregunté cómo lo iba a hacer con las faenas y me respondió que va a contratar servicios, por ejemplo, para la siembra; mi vecino tenía cinco trabajadores y se quedó con dos. Por eso no me sorprenden las estadísticas que muestran una alta cesantía en el sector”, comentó.
González recordó que, como gremio, “desde hace tres años venimos pidiendo a las autoridades fomentar el uso de paneles fotovoltaicos en los campos, potenciar los instrumentos concursables para instalar paneles fotovoltaicos y generar nuestra propia energía; pero ha sido lento, poca respuesta”.
Los gremios están trabajando en una propuesta para presentar al Gobierno Regional de Ñuble y a las autoridades sectoriales, de manera de abordar con distintas medidas el fuerte impacto en las empresas.
“Creemos que hay que inyectar recursos en el sector agrícola; el Gobierno Regional dispone de un presupuesto importante, han financiado gran número de proyectos, entonces, por ejemplo, podrían destinar $5 mil millones para paneles solares”, propuso el dirigente agrícola.
Además, planteó reactivar el subsidio a la retención de mano de obra. “Recuerdo que el año pasado se hizo a nivel nacional y quizás este año se puede implementar a nivel regional, yo sé que los recursos son muy escasos, pero ese subsidio funcionó muy bien en el sector”, sostuvo Carlos González.
Se estudian alternativas
El seremi de Energía, Dennis Rivas, subrayó que la Ley de Estabilización “viene, de forma responsable, a aportar gradualidad en el incremento de la tarifa”.
También señaló que, “en paralelo a la implementación del subsidio eléctrico se encuentra trabajando una mesa técnica analizando y proponiendo distintas alternativas para ampliar el nivel de cobertura, pero todo esto supeditado a una nueva fuente de financiamiento”. En ese contexto, acotó que no se descarta un apoyo a ningún segmento, por ejemplo, las pymes.
El seremi reveló que, “de igual forma, nosotros estamos trabajando, en etapa previa, para levantar un proyecto con el Gobierno Regional, asociado a las Pymes, con una iniciativa que se llamaba Ponle Energía a Tu Pyme, que lo hacía el Ministerio de Energía, y queremos hacer un similar a este proyecto, pero enfocado en las Pymes de Ñuble, que particularmente podría ser la implementación de sistemas fotovoltaicos de generación, que repercutiría en las cuentas de la luz de las Pymes. Pero es no está definido aún, no está cerrado, pero esperamos tener buenas noticias pronto”.
