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El informe “El mundo del trabajo requiere un nuevo impulso”, del Observatorio Perspectivas, analizó los sectores más afectados por la debilidad del mercado laboral.
Según el documento, los hombres tienen un promedio de 26,9% de informalidad, versus un 30% en las mujeres. Un fenómeno similar ocurre con los extranjeros, con un 30,5% en los hombres y un 34,3% en las mujeres.
El estudio señala que “las trabajadoras por cuenta propia siguen siendo las más informales, llegando casi a un 73%, y seguidas por las del servicio doméstico con un 60%. Por su parte, la informalidad aumentó más de 11 puntos en la categoría de las empleadoras, pasando de un 8,6% a un 19,6%”.
El director ejecutivo del Observatorio Perspectivas, Gabriel Cestau, explicó que “la informalidad está aumentando y es aún más elevada entre los extranjeros. Muchos factores pueden estar detrás, pero algunas de las principales causas son las limitaciones a la jornada de trabajo, el aumento de los costos laborales por imposiciones legales y las rigideces en la tramitación de visas”.
Otro aspecto abordado es la subutilización laboral, o la inadecuación entre la oferta y la demanda de puestos de trabajo. La tasa de subutilización laboral está en 20,8%, lo que representa un aumento interanual de 0,4 puntos. Las regiones más afectadas son La Araucanía (31,3%), Los Ríos (28,3%) y Ñuble (27,8%).
El documento señala que, en el caso de Ñuble, si bien el aumento de la subutilización del trabajo respecto al año anterior fue acotado (0,8 pp), este indicador se mantiene alto debido a que hay 34 mil personas dentro de la fuerza de trabajo potencial (+13,6%). Adicionalmente, los ocupados que buscaron empleo aumentaron 21,1% en comparación al año anterior.
“A nivel país, el empleo a tiempo parcial involuntario, es decir, aquellos ocupados que si tuvieran la posibilidad de trabajar más horas lo harían, ha aumentado un 19,1% respecto al año anterior, siendo el principal conductor del aumento en la subutilización laboral”, explicó Cestau.
El informe concluye que, para reimpulsar el mercado laboral, es necesario aplicar políticas públicas que hagan énfasis en disminuir la informalidad laboral femenina y extranjera, sobre todo, en los segmentos de trabajadoras domésticas y por cuenta propia; frenar la subutilización del empleo y aumentar la productividad.