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Funcionarios de la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones de Chillán recibieron órdenes de la Fiscalía Local para iniciar las indagatorias que persiguen presuntas responsabilidades penales en el actuar del personal profesional de Salud a cargo de la atención de cuatro de las cinco personas que fallecieron entre el 21 y 23 de mayo a causa de un cuadro de influenza.
La primera diligencia fue el retiro del féretro del escolar de 15 años quien falleció durante la madrugada del 23 de mayo en el hospital chillanejo, el que estaba siendo velado en casa de su familia en el sector de Puente Ñuble.
Sergio Pérez, jefe de la Fiscalía Local de Chillán, explicó que en esta ocasión el ente persecutor actuará de oficio, considerando “la posición de garante que obliga al equipo de profesionales a entregar una atención adecuada, cumpliendo con los reglamentos y las exigencias que se debe aplicar para cada una de las personas que concurren en los recintos asistenciales”.
Respecto al quinto caso, el fiscal Pérez anunció que ya ordenó instrucciones a la PDI para recopilar la información necesaria como para establecer o descartar la posibilidad de incluirlo dentro de las investigaciones ya ordenadas.
Familia
Luis Hermosilla, tío del joven fallecido informó a La Discusión que el féretro fue trasladado hasta el Servicio Médico Legal para realizar una autopsia, en el marco de las diligencias solicitadas por la Fiscalía.
“Como familia todos estamos esperando que se esclarezca el tema porque el niño entró enfermo, pero entró por sus propios medios, y lamentablemente salió fallecido al otro día”, dijo.
La Fiscalía señaló que la diligencia se realizó con el conocimiento de la familia, la que, además, se encuentra colaborando con la investigación, y está bajo apoyo de la Unidad de Atención a Víctimas y Testigos de la Fiscalía de Ñuble.