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Una compleja situación alertó Gendarmería en el Centro de Detención Preventiva Santiago 1, a partir de la entrada en funcionamiento de inhibidores de señal de teléfonos para evitar que los internos sigan delinquiendo desde el interior del penal.
Los gendarmes afirman que existen diversas amenazas por parte de reos organizados que buscan impedir la instalación de inhibidores.
En ese sentido, desde el órgano penitenciario apuntan a que se contrataría a “sicarios” para disparar a las antenas desde el exterior. También se ha mencionado motines con amenazas de tomar como rehenes a abogados defensores.
Según radio Bío Bío, a través de un instructivo que es emanado por Gendarmería y que llegó a todos los funcionarios de las plantas 1 y 2, es decir, a los altos oficiales, además de gendarmes y sus oficiales de la misma institución, se señala que a contar desde este jueves en adelante “se suspenden todos los permisos estatutarios del personal de las plantas 1 y 2 hasta nueva orden”.
“Los funcionarios uniformados, a contar del día de hoy, no podrán salir de la jurisdicción debiendo quedar disponibles y atentos al plan de enlace”. O sea, estar atento a los llamados y contactos en caso de que se necesite, por parte del mando de Gendarmería.
Además, se agrega que las jefaturas deberán notificar por escrito de la presente providencia al personal de todas las cárceles de la Región Metropolitana.
El ministro de Justicia, Luis Cordero, señaló que se han tomado todos los resguardos necesarios para evitar una crisis de seguridad que comprometa la vida de defensores y persecutores.
El titular de Justicia sostuvo que la inhibición se va a ejecutar durante las próximas semanas y advirtió que caerá todo el rigor de la ley a quienes quieran evitar su correcto funcionamiento.
Por último, Cordero afirmó que el Estado ha tomado todas las medidas preventivas y de coordinación eficaz para evitar que se produzca cualquier conflicto al interior de los penales.
