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Por quinta vez fracasó la licitación de las obras de ampliación de la línea 66 kV Charrúa-Chillán, por US$ 6.393.909, luego que ayer se confirmara que fue declarada desierta, lo que deja nuevamente a la deriva un proyecto clave para la transmisión eléctrica en la región, ya que la infraestructura de esta línea que alimenta a Chillán y a la zona suroriente de la región ya está sobrepasada, constituyéndose en un verdadero cuello de botella que pone en riesgo la estabilidad del suministro en periodos de alta demanda y mantiene paralizados cientos de proyectos de inversión por no tener la factibilidad técnica de conexión a la red eléctrica.
La misma suerte corrió la licitación de las obras de aumento de capacidad de la línea 66 kV Monterrico-Cocharcas, por US$ 892.658.
Como se recordará, en noviembre pasado el Coordinador Eléctrico Nacional realizó el llamado a (re)licitación pública internacional para la adjudicación de la construcción de cinco obras de ampliación de la transmisión en el país, correspondientes a los decretos de 2018 y 2019, entre ellas, Charrúa-Chillán y Monterrico-Cocharcas.
En aquel momento, el gerente de Copelec, Patricio Lagos, criticó la decisión de licitar estas obras por quinta vez y anticipó un fracaso rotundo, tanto por factores técnicos como económicos, de hecho, sostuvo que el valor referencial publicado en la licitación es el mismo de la primera licitación en 2019. Lagos también advirtió que este camino significaba, en la práctica, un retraso en la concreción de este proyecto que, en la última licitación, la empresa que se lo adjudicó abandonó las obras en 2022 por las alzas de costos.
Y si bien CGE estaría dispuesta a abordar la ampliación de la línea Charrúa-Chillán -de su propiedad-, según lo explicitó la compañía en la reunión que sostuvieron las empresas del sector con el ministro de Energía, Diego Pardow, en su visita a Chillán en mayo de 2023, lo haría por tres o cuatro veces el valor referencial, estiman fuentes del sector.
Al conocer del fracaso de esta quinta licitación, Lagos manifestó que “no hay voluntad para que la empresa dueña de las instalaciones desarrolle el proyecto”.
“El escenario ideal sería que el propietario de las instalaciones las tomara, se hiciera cargo y las pudiera ejecutar sin tener que pasar por un proceso de planificación centralizada como el plan de expansión. Por ello, dado el compromiso adquirido en mayo del año pasado, es hora de cumplir ese compromiso. Claro que aquí falta la Ley de Transición Energética, que todavía está en el Congreso, donde se incluyen estos apartados especiales de transmisión”, aseveró el ejecutivo, quien enfatizó que “el mecanismo centralizado de planificación, vía planes de expansión, fracasó en Ñuble”.
“Otro aspecto clave es que se cumpla ese compromiso en el menor tiempo posible; que es otro compromiso que hay entre CGE y el ministro de Energía, que fue lo que se señaló en el encuentro realizado en Chillán. Tal vez hay una estrategia por parte de la compañía, de no postular para que se le asigne directamente, pero también tiene que haber un sentido de urgencia, hay que ver que esto se haga lo antes posible, ya no hay más tiempo, hay proyectos inmobiliarios, villas completas que no tienen factibilidad positiva. La responsabilidad es de la autoridad política y de CGE. Cinco licitaciones para una sola obra es impresantable, ¿qué le decimos a los inversionistas, a los trabajadores?”, añadió el gerente de Copelec.
Contratación directa
Precisamente, el subsecretario de Energía, Luis Felipe Ramos, visitó ayer la región, jornada en la que sostuvo reuniones con el delegado presidencial, Anwar Farrán, y con el gobernador regional.
Consultado al respecto, Ramos manifestó que “lo que estamos evaluando en este momento y que sería la mejor opción posible, es la adjudicación directa, porque dado que ha habido más de dos procesos de licitación, se debe evaluar la posibilidad de que se pueda adjudicar directamente la obra, lo que nos permitiría también hacerlo más rápido. Ésa es una de las alternativas que estamos evaluando”.
El subsecretario argumentó que este mecanismo permite buscar a la empresa que ofrezca las mejores condiciones, teniendo en cuenta la experiencia de los procesos licitatorios anteriores. No obstante, declinó adelantar si CGE podría hacerse cargo de la obra. Lo que sí aseguró es que en las próximas semanas debiera haber una decisión por parte de la Comisión Nacional de Energía y el Coordinador Eléctrico Nacional sobre el camino a seguir.
No obstante, comentó Ramos, “hay otras medidas que también están avanzando en paralelo, pero que son de distinta naturaleza y con distintos tiempos. Uno es el proyecto de Ley de Transmisión Eléctrica que establece cambios al régimen de transmisión, lo que se busca en términos muy resumidos, es tener licitaciones que sean más rápidas, pero también más efectivas, que logren llegar a adjudicaciones, junto con otras medidas que se han comprometido respecto al Plan Ñuble, como, por ejemplo, el estudio de demanda energética y el Open Season que se está organizando para convocatorias de obras urgentes”.
En esa misma línea, el gobernador regional, Óscar Crisóstomo, reiteró, tal como lo había hecho en ocasiones anteriores, la necesidad de adjudicar por vía directa estas obras. Señaló que, aprovechando la visita del subsecretario, “le hemos planteado la necesidad de avanzar con mayor dinamismo en la transmisión de energía en nuestra región; le manifestamos nuestra preocupación respecto a que, por quinta vez, se declaró desierta la licitación de la línea Charrúa-Chillán y la línea Monterrico-Cocharcas; líneas estratégicas para nuestra región que permiten generar condiciones para el desarrollo productivo y económico”.
Al mismo tiempo, dijo que “le solicitamos al subsecretario activar de manera urgente la contratación directa de estas obras, ya que no es posible que, en su quinta licitación, nuevamente quede desierta”.
Por otra parte, Crisóstomo mostró su preocupación por la Ley de Transición Energética, debido a que el subsecretario le manifestó que se encuentra detenida en el Congreso. “Le queremos solicitar a los parlamentarios de la zona que agilicemos todas las gestiones para que este proyecto pueda salir rápidamente como era el compromiso que se había asumido el año pasado, en abril debía estar ya promulgada, pero los tiempos que estamos viendo, lamentablemente, no se ajustan a este compromiso, por eso pedimos a todos nuestros parlamentarios, para que esto sea posible y en abril este proyecto esté en marcha”.