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Los miércoles de Mario Salas en Paso Alejo se transformaron en el miércoles de Christián Guzmán.
Debido a que el “Comandante” fue expulsado en el duelo ante Everton en Viña del Mar, esta vez fue su ayudante técnico el que sacó la voz para analizar el arranque del equipo en las primeras cinco fechas.
Y uno de los temas que desmenuzó, asumiendo que ha incidido en el rendimiento, fueron las expulsiones.
En cinco fechas, el equipo ha debido sostener los segundos tiempos con un hombre menos debido a las expulsiones de Patricio Rubio (Copiapó) y Bernardo Cerezo (Everton).
“En relación a las expulsiones, obviamente, es algo que nos ocupa y nos preocupa para poder solucionar. Si bien han sido por situaciones de juego y no por cosas extrafutbolísticas, igual nos inquieta un poco y queremos que no sucedan más, porque han generado un desgaste tremendo y han tenido una incidencia directa en nuestro rendimiento. En dos partidos seguidos, jugar dos tiempos completos con 10 jugadores sin duda, que afecta cualquier sistema y cualquier idea, así que es algo que estamos trabajando”, analizó Guzmán, quien considera que el equipo ha mejorado.
“Normalmente los rendimientos de los equipos chilenos son progresivos. Por lo que hemos visto, ningún equipo ha logrado la plenitud de rendimiento y nosotros no salimos de esa observación. Creo que hemos logrado una progresión de los principios futbolísticos que hemos buscado como idea de juego, de acuerdo a la impronta de juego colectivo. Por ejemplo, la posesión de balón con propósito que nos permite llegar al arco contrario. Estamos llegando más al arco rival, pero aún no conseguimos ese ideal que buscamos, pero si se ha dado una idea más cercana a lo que buscamos” .Finalmente, consultado por los errores defensivos evidenciados en el duelo con Everton, recalcó que focalizan la corrección “mirando más lo colectivo, desde el origen, que desde lo individual, porque todo el equipo ataca y defiende”.