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El volante argentino Gabriel Graciani, anotó su primer gol en Ñublense, transformándose en la figura del equipo en el trabajado triunfo sobre Copiapó y demostrando que puede jugar de volante y hasta de centrodelantero.
“Me gusta mucho. Entrenaba mucho en esa posición en otros lados, me gusta darle una mano al equipo. Siempre será importante, ser útil en varias posiciones suma mucho para mí, me da mucha confianza, también para el cuerpo técnico, que sabe que me puede ocupar en varias funciones. Si aporto con un gol, más efectivo para el equipo”, confesó el “Tano”.
“Por haber anotado el gol, no soy el mejor ahora ni el peor antes, conozco mis limitaciones, mi forma de jugar es para siempre tratar de aportar, hemos dejado todo, me da confianza para seguir con mi perfil. Debemos trabajar porque esto está recién comenzando. Me sirve mucho para la confianza”, concluyó.
“Gabriel lo hizo extraordinario, en las posiciones que aportó. El equipo mostró una entrega tremenda con diez hombres. Todos sudaron hasta no quedar con ninguna gota, regaron la cancha. La actitud del equipo fue tremenda, Me saco el sombrero, porque pocas veces se notó que estábamos con diez. Fue un triunfo muy trabajado”, sentenció el “Comandante” Mario Salas.