En el último tiempo, la obesidad y el sobrepeso han registrado un considerable aumento, lo que ha llevado a la Organización Mundial de la Salud (OMS) a proyectar que para el 2030, aproximadamente el 70% de las y los chilenos podría encontrarse en este grupo de personas.
Una realidad de la que Ñuble no está muy alejada, entendiendo que durante el 2023, 16.960 personas se encontraban en control por obesidad en programas de salud de la Red Asistencial, de las cuales, según los datos registrados en el Resumen Estadístico Mensual (REM) de diciembre del año pasado, el 26,4% corresponde a niños y niñas entre 6 y 9 años. Asimismo, 12.523 personas no están bajo control y registraron obesidad a través del Examen de Medicina Preventiva (EMP).
“Es preocupante ver las cifras de sobrepeso y obesidad en nuestra Región, especialmente las que señalan los altos índices existentes entre menores de 15 años. Por ello, en el Día Mundial de la Obesidad, desde nuestra institución reforzamos el llamado a cuidarnos, procurando adoptar estilos de vida más saludables con una alimentación balanceada y la realización de actividad física”, recalcó la directora del SSÑ, Elizabeth Abarca Triviño.
La directiva agregó además que, “según los datos de diciembre del 2023, el 26,4% de los niños y niñas entre 6 y 9 años se encuentran bajo control por malnutrición por exceso y un 25% de que quienes tienen entre 10 y 14 años. Cifras que nos instan a seguir fortaleciendo la promoción del cuidado de la salud, principalmente entre los niños, niñas y adolescentes”.
Entre la población adulta, se registra que el 29,5% de las personas entre 65 a 79 años también se encuentran bajo control por obesidad, al igual que el 45,2% de las mujeres embarazadas.
Factores de riesgo y prevención
La nutricionista Ximena Osorio Garrido, Encargada del Programa Vida Sana del SSÑ, precisó que, “el exceso de peso puede aumentar la posibilidad de desarrollar diversas condiciones de salud, siendo algunos de los factores de riesgo asociados: la Diabetes Mellitus tipo 2; enfermedades cardiovasculares; trastornos respiratorios como apnea del sueño; problemas articulares por aumento de presión en las articulaciones; enfermedades hepáticas; ciertos tipos de cáncer como mama, colon, endometrio y riñón; resistencia a la insulina; enfermedades metabólicas como dislipidemia y síndrome metabólico; además de que puede afectar la salud mental a través de la depresión o trastornos de la conducta alimentaria”.
“Lo fundamental es que la población adopte hábitos de vida más saludables, lo que sin duda ayuda a prevenir la obesidad y promover un peso corporal adecuado. Es así como se recomienda mantener una alimentación equilibrada que incluya frutas, verduras, cereales y granos enteros, carnes magras y grasas saludables; realizar actividad física, incorporando ejercicio en la rutina diaria como caminar, correr o practicar algún deporte; limitar el tiempo sedentario, realizando pausas activas si se pasa más de 1 hora sentado; mantener buenos hábitos de sueño; tener una hidratación adecuada; gestionar el estrés, desarrollando estrategias como meditación, respiración profunda o practica de actividades relajantes; evitar el consumo excesivo de alcohol; y realizarse anualmente el examen de medicina preventiva en los establecimientos de atención primaria de salud”, destacó la profesional.
Finalmente la nutricionista señaló que, “la combinación de estos hábitos ayudará a mantener un estilo de vida saludable y reducir el riesgo de desarrollar obesidad. La paciencia es clave, ya que los cambios a largo plazo son más efectivos que las soluciones rápidas. Además, siempre es recomendable consultar con un profesional de la salud antes de realizar cambios significativos en la dieta o el nivel de actividad física”.
Para aprender sobre nutrición, existe información disponible para la comunidad a través de las Guías Alimentarias para Chile disponibles en la página Web del Ministerio de Salud.