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Para el año 2034 se proyecta el cierre del relleno sanitario de Chillán Viejo, que recibe toneladas de desechos de las 21 comunas de la Región de Ñuble y de otras localidades del país. Mientras su vida útil se reduce con el paso del tiempo, municipios, seremi y emprendimientos locales han liderado diversas estrategias con el objetivo de disminuir la huella de la basura y sus externalidades negativas.
Ante la necesidad de minimizar la cantidad de residuos orgánicos que llegan a los rellenos sanitarios y con ello los gases de efecto invernadero, se pone en manifiesto la necesidad de avanzar en una economía circular, que permitirá transformar una situación adversa en un recurso para la Región de Ñuble.
Por esta razón, desde la Seremi de Medio Ambiente han impulsado un trabajo colaborativo, a través de líneas de acción que vayan de la mano de políticas públicas como la Ley de Responsabilidad Extendida del Productor, o ley REP, la Ley para la Gestión de los Residuos Orgánicos y la Estrategia Nacional de Residuos Orgánicos (ENRO), además de un fuerte trabajo con los más de 50 recicladores de base de la región, como con el fortalecimiento de las empresas locales dedicadas a la valorización de residuos.
La principal estrategia para lograr minimizar los residuos de diversos tipos ha sido el Proyecto Ñuble Circular, financiado por el Gobierno Regional y con diversas líneas de acción.
Una de ellas fue implementar plataformas de compostaje de ramas generadas en podas municipales en Pemuco, San Nicolás y Cobquecura, donde se pretende transformar esos proyectos pilotos en plantas.
Con estas iniciativas se busca transformar las ramas y residuos de las podas municipales en abono para mejorar el estado del suelo y la calidad de aire en las comunas. Asimismo se pretende disminuir las quemas agrícolas vinculadas a incendios forestales y los gases de efecto invernadero.
“Para ello se capacitó a personal, se entregó equipamiento e instrumentos y se conformaron las pilas de compost, que actualmente están en proceso de maduración. En tanto, se chipearon aproximadamente 180 m3 de ramas en las tres comunas. Además, estamos trabajando en transformar estos pilotos en plantas de compostaje, por lo que, se están realizando estudios de ingeniería con el Banco Interamericano de Desarrollo, lo que nos permitirá avanzar hacia el financiamiento de la infraestructura y el equipamiento requeridos”, explica el seremi del ramo, Mario Rivas.
Entre otros resultados alcanzados en 2023, el proyecto Ñuble Circular ha permitido la entrega de 1.231 composteras y vermicomposteras para uso domiciliario, con lo que se estima una reducción de 2.500 kilos de residuos por día.
A través de un curso de formación de monitores ambientales, se financió el proyecto Rinconada sin Plástico, que busca sacar de circulación los envases plásticos de un solo uso recambiándolos por vasijas de loza para la comercialización de alimentos.
Y mediante una Feria Ambiental y de Reciclaje Ñuble Circular realizada el 14, 15 y 16 de diciembre , se pudo reunir un total de 2,5 toneladas de los seis tipos de residuos prioritarios (envases y embalajes, neumáticos fuera de uso, baterías, pilas, aceites lubricantes usados y aparatos eléctricos y electrónicos en desuso) establecidos en la Ley REP, y en la Feria Itinerante, que recorrió 15 comuna de Ñuble se reunió 15 toneladas, correspondiendo un 54% de los residuos recolectados en aparatos eléctricos y electrónicos. Entre ambas ferias se logró reciclar 17 toneladas de residuos.
Desafíos 2024
Dentro de las tareas a desarrollar durante este año, la cartera de Medio Ambiente seguirá con el foco en el compostaje y extendiendo los apoyos a otras comunas de Ñuble.
“En 2024 estaremos trabajando a través de la entrega de composteras a diversos comercios de la comuna Chillán Viejo. Asimismo, ha sido clave el Fondo de Protección Ambiental (FPA), con el que impulsaremos un piloto de compostaje domiciliario junto a la Municipalidad de Quillón. A ello se suma la priorización de la valorización de los residuos orgánicos en la comuna de San Nicolás y el desarrollo de un Programa de capacitación en compostaje de este tipo de residuos domiciliarios en la comuna de Bulnes”, detalla el seremi.
En el caso de Chillán, se sumará un camión de recolección de reciclaje en el sector de Parque Lantaño. En palabras del seremi Rivas, se trata de “piloto que se enmarca en la implementación de la Ley REP. Además, seguiremos fortaleciendo el trabajo con los recicladores de base, a través de la capacitación y certificación de sus competencias junto a Chile Valora”.
Evaluación y propuestas
Desde la perspectiva del director del Departamento de Mecanización y Energía de la Facultad de Ingeniería Agrícola de la UdeC, Cristian Correa, es fundamental priorizar la reducción de residuos de tipo orgánico, ya que de un kilo de desechos, que se genera por día en promedio en Ñuble, cerca de un 60% de esa basura es orgánica.
“Para abordar este problema se requiere un cambio de mentalidad a nivel ciudadano, no solo en términos de entender la importancia del tema, sino que apuntar a tomar acciones y compromisos personales. Por otra parte, se requiere el apoyo del gobierno local, que pueda proveer de los medios necesarios para facilitar esta labor, por ejemplo, a través de composteras comunitarias. En el caso de las composteras domiciliarias, aún falta más capacitación y concienciación para desmitificar cuestiones como los olores o educar en cómo manejar los residuos líquidos que generan”, dice.
Por lo anterior, plantea que es clave fortalecer la estrategia de compostaje a nivel domiciliario y comunitario que ya está en curso y que han adoptado diversos municipios. “Esto requeriría reforzar las campañas de concientización, capacitación y facilitación de recursos por parte de los gobiernos locales”, añadió.
A su juicio, las iniciativas ejecutadas a nivel local para minimizar desechos, como puntos verdes o ferias de reciclaje, van en la dirección correcta para atender esta problemática, sin embargo, requieren mejoras sustanciales en términos de frecuencia, manejo y acceso.
“En la ciudad hay escasez de puntos de recepción de botellas, ya sea plásticas o de vidrio. Aquí la misión del Estado, a través de los municipios, es facilitar esta labor a la comunidad, aumentando el número de puntos de recolección, acercándolos a los usuarios, de modo de que la lejanía a estos puntos no se transforme en una excusa para no utilizarlos. Es una imagen común, en la ciudad, ver los contenedores de botellas de vidrios saturados. Aquí los conceptos de ciudad inteligente e Internet podrían ayudarnos a gestionar de mejor forma la recogida de estos residuos. Aquí los invito a imaginar una App que le diga al usuario el punto verde más cercano y su estado de saturación y, por otra parte, le permita a las autoridades, conocer cuándo realizar la recolección, qué puntos necesitan aumentar su capacidad o identificar qué puntos tienen bajo nivel de uso de modo de relocalizarlos”, sostiene.
Estima que es vital ampliar la red de puntos verdes y mejorar la gestión de los existentes, por medio de tecnologías y sistemas inteligentes.
“La adopción de tecnologías como aplicaciones móviles que informen sobre la ubicación y capacidad de los puntos verdes, así como sistemas de monitoreo para optimizar la recolección de residuos, podría mejorar la eficiencia en la gestión de residuos y reducir la presión sobre los rellenos sanitarios”, precisa.
Ejemplos de reciclaje
En el esfuerzo continuo por preservar el medio ambiente y reducir los costos asociados a la gestión de la basura, los municipios y los emprendedores han tenido un rol relevante.
Entre algunos emprendimientos ñublensinos destaca “Recicla Aceite”, que a través del material descartado crea productos ecológicos como jabones, velas y detergentes. Otro ejemplo es “Incauta confección” que crea carteras y mochilas con telas y bolsas plásticas recicladas. “RepSyclick” , por su parte, transforma los desechos orgánicos de la agroindustria para luego convertirlos en fertilizantes.
La Municipalidad de Chillán Viejo ha desarrollado el proyecto Recicla más, que considera el aumento de la capacidad y cobertura de los puntos limpios, jornadas de educación ambiental sobre compostaje y vermicompostaje, entregándoles a las 300 familias participantes un kit para ello.
Por su parte Chillán ha ejecutado el programa de vermicompostaje y compostaje dirigido al reciclaje de residuos orgánicos en la comuna. Se trata de kit de compostaje que corresponden al programa “Chillán con Actitud Verde”, que ha liderado diversas acciones en esa línea.
El m de San Nicolás ha consolidado su compromiso con la implementación de prácticas sostenibles durante el año 2023. El alcalde Víctor Hugo Rice destaca los logros obtenidos y los planes futuros durante.
“Durante el periodo de enero a diciembre del 2023, se dispuso en el relleno sanitario planta Ecobio ubicada en la comuna de Chillán viejo, 4.482 toneladas de residuos domiciliarios, equivalente a un gasto municipal de $77.004.391”, detalla el alcalde Víctor Hugo Rice.
A raíz de los altos costos y las externalidades negativas asociadas a la basura, la comuna ha dado un paso significativo hacia la sostenibilidad. Es así que, en términos de resultados, durante 2023, San Nicolás logró reciclar 100.700 kilogramos de vidrio, 5.000 kilogramos de botellas PET y cerca de 2.500 litros de aceite proveniente de frituras. Asimismo, se valorizaron alrededor de dos toneladas de residuos orgánicos a través del Programa Municipal de Separación de Residuos Orgánicos en origen, operando en el centro de compostaje municipal. Este proceso transforma los residuos orgánicos en compost o abono natural, promoviendo prácticas agrícolas sostenibles.
El alcalde Rice destaca, además, la iniciativa actualmente en desarrollo para establecer una Planta de Compostaje Municipal a gran escala, que permitirá valorizar los residuos orgánicos de toda la comuna. En este proyecto, el municipio cuenta con el respaldo técnico del Ministerio de Medio Ambiente, fortaleciendo la colaboración entre instancias gubernamentales y locales para alcanzar objetivos ambientales.