Señor Director:
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define grupos etarios para el uso de tecnologías. Se debe considerar que
antes de los dos años no se podría hacer uso de pantallas, iniciando un uso gradual y limitado de éstas después de esa
edad. Y luego, los niños sobre 5 años y adolescentes debiesen utilizar solo dos horas de pantalla por día, de acuerdo con los
especialistas. Su uso excesivo podría traer diversos riesgos asociados, como fatiga visual y problemas de sueño, de salud
física o de salud mental. Es probable encontrar baja tolerancia a la frustración, irritabilidad y sintomatología ansiosa.
Luego de la pandemia por Covid-19, se experimentó un aumento considerable en el uso de pantalla y tecnologías.
Éstas, con fines educativos y lúdicos, se instalaron en la vida de niños, por lo tanto, el retiro de las tecnologías o pantallas
por parte de los padres es algo improbable en el escenario actual.
Sin embargo, a modo de restricción, se pueden establecer medidas como límites en tiempo de uso y rutinas estable-
cidas, por ejemplo, acceder a tecnologías después del almuerzo o hasta antes de cenar. También se puede considerar
el desarrollo de tareas domésticas o académicas que permitan la utilización de pantallas como recompensa.
Si bien el uso de tecnologías puede facilitar la comunicación entre los hijos con su grupo familiar, igualmente puede
afectar su desarrollo cognitivo y social. Frente a esto es importante que se establezcan límites, como un horario en que
la familia pueda establecer un diálogo sin el uso de pantallas, como sería durante las comidas.
Juan Orias Salazar
Académico Psicología USS