Señor Director:
El día viernes ha fallecido nuestro queridísimo amigo, camarada, una de las figuras más importantes en la vida de la Democracia Cristiana, Renán Fuentealba Moena. Fue diputado, senador y siete veces presidente del Partido. Más allá del cariño que le teníamos todo, fue uno de los hombres que marcó un rumbo a la Democracia Cristiana. Fue un guía directo en la conducción de los jóvenes y no se equivocó en la manera de enfrentar dificultades que tuvimos para el Partido, la democracia y el país.
Tuve el honor, junto a otros once camaradas, de firmar con él la carta de los 13, que significó el inicio de la lucha contra la dictadura. En los tiempos de hoy y dada las dificultades que la política representa en el mundo de cambios en Chile, su presencia como hombre honesto y consecuente se hace notar porque jamás faltó a sus principios como demócrata cristiano antes y durante su trabajo en el Senado, la Cámara y en la vida ciudadana.
Renán tuvo una hermosa vida personal, fue un gran amigo al que extrañará mi familia y yo cada día.
Mariano Ruiz Esquide Jara