El jueves último, dos sujetos que intentaban abrir autos en los estacionamientos de un supermercado ubicado en Avenida Vicente Méndez, fueron sorprendidos por drones de televigilancia.
La particularidad, además de la efectividad de este nuevo tipo de patrullajes, fue que los dos detenidos, un hombre de 37 años y una mujer de 29, registran domicilio en Santiago.
Lo anterior es uno de los fenómenos delictivos nuevos en Ñuble, corroborado por los organismos de persecución penal, que ha establecido además la misma particularidad para otros delitos.
La fiscala regional, Nayalet Mansilla, durante su última cuenta pública, la semana pasada, dio cuenta de realidad de las bandas criminales en la región.
“Un dato que llama la atención es que el 56% de los formalizados por la Fiscalía de Análisis Criminal y Focos Investigativos de Ñuble tiene domicilio en otra región y vienen a Ñuble a cometer delitos”, afirmó la persecutora.
En agosto del año pasado, el fenómeno fue revelado a La Discusión por dicha unidad del Ministerio Público.
“Ellos tienen la errónea idea de que acá la gente no está preparada y que las policías no tienen la capacidad suficiente para reaccionar”, explicó entonces el fiscal Álvaro Hermosilla, jefe de la unidad de Análisis Criminal y Focos Investigativos (SACFI) del Ministerio Público Regional de Ñuble.
El fiscal sostuvo que las cámaras, las alarmas, los drones y la organización vecinal a través de redes sociales, ha jugado un papel preponderante y son más las bandas que hoy están encarceladas, que las que se han logrado arrancar.
“Hay bandas que han sido detenidas tras haber cometido una serie de delitos por aquellas regiones o ciudades por las que se van trasladando y hay otras que, derechamente, se vienen a delinquir a Ñuble”, acotó.
A raíz del aumento de casos de asaltos y otros delitos cometidos en la región con la constante de utilizar armas de fuego (fenómeno inusual hasta el 2019 en Ñuble), la unidad Sacfi abrió diversas carpetas de investigación.
“Y en todos los delitos que comenzamos a investigar desde el inicio de la pandemia en Ñuble, en 2020, y que tenían como común denominador que eran bandas de dos o más personas, logramos determinar que un 40% estaban conformadas por personas que venían de afuera. Pero, en 2021, cuando -pese a encontrarnos aún con ciertas restricciones sanitarias- la cosa comenzó otra vez a normalizarse y hay más libertades de tránsito, es cuando observamos el aumento de la violencia en los delitos y que las bandas detenidas ya eran en un 90% gente de afuera”, relató el fiscal en agosto del año pasado.
Sin asociación con delincuentes locales
De todas maneras, desde el Ministerio Público Regional, aclaran que hasta el momento, no se ha encontrado indicios de bandas foráneas que hayan armado asociaciones ni colaboración con delincuentes locales.
Y agregan que “lo observado apunta a que ellos estudian el lugar, se organizan desde afuera y vienen a delinquir, pero no hemos establecido vínculos de ningún tipo con personas con residencia en Ñuble”.
Texto: A.Henríquez/F. Ahumada