Este pasado viernes 30 familias del conjunto habitacional “Nueva Ilusión”, en la comuna de Ránquil, recibieron las llaves de su vivienda de manos del seremi de Vivienda y Urbanismo, Carlos Urrestarazu, del delegado presidencial Cristóbal Jardua, y el alcalde de la comuna, Nicolás Torres.
“Estamos comprometidos con las familias de Ñuble, sacando adelante estos proyectos tan anhelados por las familias que les darán mayor tranquilidad y una mejor calidad de vida, sobre todo en estos tiempos de pandemia. Solo queda agradecer a la presidenta del comité, Alejandra, por su compromiso y la paciencia que han tenido todos estos años para poder al fin ver finalizado este sueño”, sostuvo el seremi del Minvu, Carlos Urrestarazu.
El alcalde de Ránquil, Nicolás Torres, mostró su alegría por esta nueva entrega de viviendas y reiteró su compromiso con la comunidad “como municipio estamos súper contentos de poder aportar y apoyar en mejorar la calidad de vida de nuestra gente. Desde que asumimos hace siete semanas nos propusimos la misión de acelerar la entrega de viviendas en nuestra comuna, donde ya pudimos inaugurar “Villa La Esperanza, 10 de Julio” y con mucha alegría ya estamos ad portas de inaugurar también el conjunto habitacional “Nueva Ilusión” de un sector muy importante como lo es Nueva Aldea”, sostuvo la autoridad comunal.
Torres añadió que “en ese sentido vamos a seguir trabajando para poder lograr que nuestra gente sienta que sus problemas están siendo solucionados”
Por su parte, Alejandra Águila, presidenta del comité “Nueva Ilusión” señaló que “todos los socios estamos felices de cumplir un sueño anhelado por muchos años y más aún porque es una vivienda digna la que recibiremos por parte del Gobierno, algo que jamás habíamos logrado obtener hasta ahora”.
Sobre el proyecto
El proyecto habitacional se enmarca en el Programa Fondo Solidario de Elección de Vivienda, DS49, beneficio que permite a las familias adquirir su casa propia sin necesidad de contar con un crédito hipotecario.
La inversión total alcanza cerca de $740 millones de pesos y cada vivienda fue construida de acorde a las necesidades de las familias, considerando la urbanización completa de calles y pasajes, evacuación de aguas lluvias, áreas verdes con juegos infantiles y máquinas de ejercicios.
